La historia de la plaza Murillo, el bullicio de las calles Ingavi y Pinchincha y los fantasmas de la Jaen desembocan en un espacio ubicado en frente del romántico parque Riosinio, marcando tradición escondida, el Museo Costumbrista “Juan de Vargas”.
Caudal de historias y tradiciones paceñas que se fueron perdiendo con el paso de los años, rescatadas en una remodelada vieja casona construida en la época Colonial y bautizada en honor al primer alcalde que tuvo La Paz.
Espacio que guarda legado cultural, que hace de este museo distinto a los otros.
“El Museo Costumbrista tiene una temática histórica, tradicional y llena de costumbres paceñas a diferencia de los otros cinco que están en la ciudad”, relata la directora de la Unidad de Museos de la Alcaldía, Vania Coronado
PASAJES DE LA HISTORIA
Al iniciar el recorrido, se encuentran todos los dioramas que son de vital importancia porque mediante pequeñas piezas se observan reflejados diferentes pasos cronológicos de la historia, como La Fundación de La Paz.
“La preferencia de los extranjeros y niños que visitan el área es la muerte de, Túpac Katari, que fue inmolado con cuatro caballos, la ejecución en la orca de Pedro Domingo Murillo uno de los principales promotores de la emancipación y la lucha por la libertad de los pueblos de América y la ambientación del primer cotejo entre los clásicos rivales del fútbol paceño The Strongest y Bolívar”, aseguró Coronado .
Advirtió que el sector donde los visitantes permanecen mayor tiempo es la exposición permanente de danzas contemporáneas de la ciudad y del altiplano, cuyas piezas fueron hechas en cerámica y denotan la belleza incomparable de nuestro folklore, que por la perfección, parecen tener movimiento si el visitante los observa fijamente.
“Es como revivir las fiestas tradicionales y la historia que encarna el entorno social en el que se desarrollan según las diferentes épocas”, relató.
Existen pinturas en tamaño real de La Paz de antaño en las que se rinde honores a la chola paceña y la elegancia de su vestimenta, además de escenas del antiguo tranvía de la ciudad.
Impresionan las imágenes de tambos precolombinos, que en un principio eran hostales de agricultores que realizaban un intercambio de variedad de productos como frutas y verduras.
Impecable se encuentra en una vitrina la ancestral vestimenta indígena del “ch’uta chucuta” utilizado en las fiestas de carnaval, “este traje corresponde al año 1940”, decía al mostrar la pieza, la enorgullecida autoridad.
También se guarda celosamente un traje que data del tiempo del Incario, perteneciente a un chasqui , emisario de una élite especial, “así vestía el encargado de llevar los mensajes del Rey a grandes distancias corriendo sin descanso”, acotó Coronado.
Pero sin duda la muestra de que el tiempo fue detenido en este museo, es el imponente carruaje colonial enteramente metálico que se exhibe al ingreso del paseo, perteneciente al presidente Ismael Montes, data del año 1904 y está
perfectamente conservado.
EL MUSEO
Creado en mayo de 1978, tiene como objetivo difundir entre la población y sobre todo entre los estudiantes y visitantes, los tiempos más relevantes de la idiosincrasia paceña.
Con dos salas de exhibición, una exposición permanente, donde se encuentran una serie de dioramas (maquetas) ubicadas en la planta alta y otra que es área donde se presentan muestras temporales, de forma eventual, las diferentes obras de artistas contemporáneos, el Museo Costumbrista “Juan de Vargas” se constituye en un lugar de visita obligatoria para quienes desean adentrarse en una realidad reflejada en miniaturas artísticas que reviven momentos de la vida histórica, cotidiana y anecdótica de los habitantes de la Sede de Gobierno.
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