Un performance delirante de gestos, malabares y corrosiva crítica social abre la segunda noche del Fitaz en el Teatro Municipal, con cinco personajes de la obra No pirex, del elenco brasileño Armatrux. Con 20 años de trayectoria y un paseo por los lenguajes teatrales de circo, títeres y payasos, los actores descartan la palabra, para enfrentar al público las relaciones de poder, sexo, amor y muerte.
Dramaturgia. Para el sexto día del Fitaz 2012, una obra literaria trasladada a la dramaturgia es la propuesta de la compañía española El Astillero, con la obra 30 grados de frío. La puesta, basada en el libro Cartas de Rusia, de Juan Valera, se estrenó en 2007 y tiene a José Ramón Fernández, Luis Miguel González y Ángel Solo como a sus creadores.
El 27, la obra Estupor y temblores, basada en la novela de la belga Amélie Nothomb, ganadora del Gran Premio de Novela de la Academia Francesa, narrará con humor ácido, el mundo de la cultura japonesa, costumbres y forma de vida, a través de una visión humilde, divertida e inteligente de una joven belga de 22 años de edad, que debe luchar contra su doble desventaja, ser occidental y mujer, para integrarse en una empresa nipona fuertemente jerarquizada, que la hará sufrir una progresiva y humillante degradación laboral. El elenco del Teatro de los Hombres propone esta historia, dirigida por Layla Metssitane.
El Teatro Nacional Cervantes llega de la mano de El Bululú, con su hombre-elenco, Óscar “Osqui” Guzmán, quien invoca a sus ancestros y los confronta con lo actual. “Osqui”, de padres bolivianos, inició su actividad como actor al hacer teatro callejero en 1992, 13 años después conoció la fama a partir de la televisión.
La representación chilena llega con dos obras: Me desordeno amor, de La Reina del Mambo, que entrega un viaje a la sensibilidad femenina a través de la unión del teatro, la poesía y la música. Y La casa de los espíritus, de la Compañía de Teatro de Cámara, que, de forma “entretenida”, captura la sensualidad de la novela de Isabel Allende, a través del estilo original y poético caracterizado por Caridad Svich, que narra la historia de una familia latinoamericana y los acontecimientos históricos de un país a mediados del siglo XX; esta puesta cierra el ciclo de presentaciones en el Teatro Municipal el 4 de abril.
1978 Este año se forma Teatro de Cámara, y en estos 34 años de trayectoria pone énfasis en obras de autores vivos, nacionales y extranjeros.
1993 Es el año de la fundación de la compañía El Astillero, su objetivo era someter a discusión permanente textos propios y ajenos, a la vez de desarrollar proyectos colectivos de escritura.
1991 En este año se fundó el elenco Armatrux, como una iniciativa emprendida en la antigua escuela de Tangram, debutó con la obra Wake Aderbal.
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