De niña Rosmery Mamani pintaba en las piedras. Entonces sus dedos hacían de pinceles para dar forma a las olas del lago Titicaca y a las ovejas que pasteaba en la comunidad Cajiata, ubicada en la provincia Omasuyos de La Paz.
De esas historias pasaron más de dos décadas y ahora Mamani, de 28 años, es considerada uno de los talentos bolivianos más prometedores de esta década, pues con sus obras la joven artista ha conquistado el ojo de las bienales y galerías del viejo continente. El más reciente premio lo recibió de la Bienal Internacional del Pastel, en España, donde se posesionó en el primer lugar.
"Vivo un sueño. He nacido en una comunidad del altiplano, donde mi destino más seguro era: arar la tierra, casarme y criar hijos. Pero, por azares del destino, logré ser artista”, comentó.
Para el director del Museo Nacional de Arte, Edgar Arandia, los trabajos de Mamani sobresalen en Europa porque el arte contemporáneo cansó a la gente y en la actualidad buscan obras "más tradicionales” en técnicas como el pastel y la acuarela.
Cuando él vio por primera vez un retrato de la artista quedó impresionado "por su habilidad a la hora de interpretar una fotografía con una técnica pulida”.
Las obras de la pintora han recorrido ciudades de Francia y España desde 2010, cuando participó por primera vez en una exposición organizada por la Unesco, en París. "Vendí todas mis obras. En esa ocasión, recibí excelentes críticas”, indicó la artista.
Luego de esa experiencia y decidida a conquistar el viejo continente, Mamani comenzó a enviar imágenes de sus obras a varias convocatorias de arte en Europa. Fue así que en 2012 resultó seleccionada para exponer en el Festival Internacional du Pastel Ville de Feytiat y el de Saint-Florent-leVieilm, en Abbaye (Francia).
Además, obtuvo importantes reconocimientos como el Segundo Premio de Pintura, en la categoría retrato de la Asociación de Pastelistas Españoles.
Ella considera que sus trabajos han llamado la atención en Europa, porque retrata personajes cotidianos del país. Desde ancianas, mujeres y hombres aymaras hasta afrodescendientes, lustrabotas y todo cuanto sus ojos captan en las calles de La Paz y El Alto. Más allá de pintarlos, Mamani es capaz de retratar el alma de sus personajes. "Me gusta pintar lo que transmiten a través de sus ojos”, mejor si es a través de las técnicas del pastel o la acuarela.
Una ganadora indiscutible
Mamani no sólo ganó premios en Europa. Su primer galardón lo recibió a los 16 años, en un concurso intercolegial de La Paz. "Me sentí feliz, pero lo más irónico fue que a pesar de ser un certamen artístico gané una beca para estudiar Contabilidad”, recordó.
Así se convirtió en la artista de la escuela. "El director me pidió un retrato al óleo y me pagó 50 bolivianos”, dijo.
También pintaba a pedido. Ofertaba sus retratos a cinco bolivianos. Después de graduarse, del colegio, ingresó a la carrera de Auditoria de la Universidad Pública de El Alto, en la que permaneció hasta el tercer año. En ese trajín, ganó una beca para estudiar Medicina en Cuba.
"El 2005 fue un año determinante. Me enteré que había una Escuela de Artes en El Alto. Fue entonces que decidí dedicarme a la pintura”, contó. "Mi papá me quitó su apoyo, me dijo que hiciera con mi vida lo que quiera”, relató. Se inscribió a la Escuela Municipal de Artes de El Alto y conoció al maestro Ricardo Pérez Alcalá. "Su llegada fue fundamental en mi carrera”, aseguró.
Meses después de ese encuentro, Pérez Alcalá tuvo que dejar la escuela por problemas de salud, pero seleccionó a cinco de sus mejores alumnos, Mamani fue una de ellos, para darles talleres en su casa.
"Rosmery es una artista completa. Maneja la técnica y sabe plasmar el alma que transmite la gente”, sostuvo en una ocasión Pérez Alcalá.
La artista es la mayor de cinco hermanos. Su mayor inquietud es la de ayudar a su familia, por ello cuando ganó los 15.000 bolivianos del premio del Salón Pedro Domingo Murillo, en 2009, construyó su casa. "Mis papás estaban felices, porque antes sólo vivíamos en dos cuartos pequeños”, reveló.
Por ahora, Mamani trabaja en una serie de cuadros que expondrá en Francia, en mayo del próximo año. Nuevos personajes habitarán sus retratos.
Mamani conquistó el primer lugar con su obra Raza de Bronce II
Es la primera boliviana en ganar la Bienal del Pastel en España
"Estoy feliz porque he ganado otro premio para Bolivia. Competí con 105 artistas de más de 27 países y saqué el primer lugar”. Rosmery Mamani celebra su más reciente galardón otorgado por la Galería Monticelli, en la segunda Bienal Internacional de Pintura Pastel en España. Es la primera vez que una boliviana recibe este reconocimiento.
La artista fue elegida por su obra titulada Raza de bronce II, elaborada en la técnica del pastel. "Plasmé la imagen de un anciano que encontré en la calle. Cuando lo vi me impactó su mirada. Sentía que me transmitía un sentimiento fuerte y le dije que quería pintarlo”, contó. Para la artista, la imagen de este anciano representa "al hombre andino que tiene la piel morena, casi color cobre, y a los aymaras trabajadores, llamados también raza de bronce”.
Mamani fue una de las tres artistas latinoamericanas seleccionadas para participar en la bienal, que inició el 22 de noviembre pasado en la sala municipal de exposiciones Trascorrales, en la ciudad española de Oviedo.
La creadora envió dos obras sobre personajes cotidianos del país. En la cita participaron 105 pintores de Francia, Rusia, Turquía, Austria, Portugal, Costa de Marfil, Egipto, Inglaterra, Taiwán, Hong-Kong, Ucrania, Holanda, Dinamarca, Alemania y España. Es organizado por la Asociación de Pintores Pastelistas Españoles.
Otros artistas que participaron fueron los españoles Alberto Piedra Fernández y Teresa González Hurst, conocidos por conquistar prestigiosos premios internacionales, como el Annual Renaissance in Pastel 2013 (Francia).
En abril de este año, la pintora conquistó el primer lugar en el II Concurso Virtual de Realismo, organizado también en el reino de España.
Un talento consolidado
El curador del Museo Nacional de Arte, José Bedoya, sostuvo que "Rosmery tiene un virtuosismo en el manejo no sólo del pastel, sino también de la acuarela. Ha tenido por maestro a don Ricardo Pérez Alcalá y ella claramente sigue la línea de su maestro, basada en el trabajo constante”. "Es una de las acuarelistas más prometedoras de la nueva generación”, aseguró.
Coincide con el curador, el artista plástico Alfredo La Placa, quien de igual forma augura a la artista un futuro exitoso.
"El hecho de que gane premios en varios países europeos quiere decir que no nos hemos equivocado (Ricardo Pérez Alcalá y mi persona) en apostar por su trabajo”, afirmó.
Una vida talentosa
Biografía Rosmery Mamani Ventura nació en 1985 en la provincia Omasuyos, del departamento de La Paz.
Estudios En 2002 se inició como retratista y paisajista de forma empírica. En 2005 ingresó al taller de Artes Plásticas de la Escuela Municipal de las Artes, en la ciudad de El Alto.
Estudios Fue alumna del maestro Ricardo Pérez Alcalá, quien se convirtió en una de sus principales influencias.
Sobre la artista
Reconocimientos La joven artista obtuvo menciones en el Salón Municipal de Pintura Pedro Domingo Murillo, en La Paz, y el Salón 14 de Septiembre, en Cochabamba.
Galardones Este año, Mamani logró el primer lugar en el II Concurso Virtual de Realismo, organizado en España. Además, expuso varios de sus trabajos en dos festivales en Francia.
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