domingo, 8 de diciembre de 2013

Daniel Gonzales “Me enamoré del Rigucho… es muy tierno”

Sin duda, El Rigucho es uno de los personajes emblemáticos de La Paz. Apareció por primera vez en 1953 en la obra “Mi compadre el ministro”, de la mano de su creador, don Raúl Salmón de la Barra, el gran dramaturgo, radialista y ex alcalde paceño.

Después una esporádica aparición en la obra “Un argentino en La Paz”, el simpático y bonachón varita de tránsito irrumpe con fuerza en 1958 en el programa de radio que se llamaba “Plato paceño”, nombre que Salmón le puso también más tarde a su exitosa obra de teatro, teniendo como protagonista al popular Rigucho.

“El éxito de Plato Paceño fue tal, que existe una fotografía muy hermosa en la que se lo ve al Rigucho con todo el teatro libre de la ciudad de La Paz lleno con unas 10 mil personas”, recuerda Daniel Gonzales (D), el conocido actor que desde 1996 decidió encarnar a este personaje como un homenaje a Salmón de la Barra.

Si bien el Rigucho fue personificado por hombres de teatro de de la talla de Tito Landa, Tino Lozada, Pablo Dávila y Hugo Pozo, en diferentes obras, Gonzales es el actor que dio vida y popularizó con bastante éxito en estos últimos 17 años a este simpático personaje, muy querido por grandes y chicos.

Como un justo homenaje a los 60 años del Rigucho, La Guía conversó con Daniel y esto fue lo que nos contó.

LG: ¿Por qué escogiste a Rigucho y no a otro personaje del pasado?

D: La primera razón fue que las obras de Salmón son un tesoro invaluable que lamentablemente estaban desapareciendo. Ya no había gente que interprete sus obras, era un legado que estaba quedando olvidado. Y la segunda razón es que me enamoré del Rigucho como personaje, es muy tierno, y me enamoré más cuando en el año 2003 don Carlos Ascarrunz, un gran periodista, me comentó que él había visto hacer el personaje a(Raúl) Salmón y me dio varios tips. El Rigucho no era el policía pulcro bien vestido, era un chiste, entonces de esa manera me enamoré más del Rigucho y la gente me empezó a identificar con él.

LG: ¿Quién es el Rigucho?

D: El Riguchito es el clásico personaje campesino que llega a la ciudad con el afán de encontrar superación. Raúl Salmón lo quería mucho, tanto que lo hizo madurar. Y yo igual, aunque trato de diferenciar mi vida con la de él, que a veces dice: “El casado es el Daniel Gonzales, yo soy soltero” (sonríe).

LG: ¿Qué satisfacciones te dio personificar a Rigucho?

R: Las más grandes de mi vida, porque gracias al Rigucho he viajado a los rincones más increíbles del país y he estado en varios programas de televisión. Quiero mucho a mi personaje porque llegar a un lugar y que no me conozcan como Daniel Gonzales sino como el Rigucho y recibir el cariño de los niños… es indescriptible.

LG: ¿Hubo algo negativo en la personificación?

R: No, quizá algunas personas ya mayores veían al Rigucho flaquito, don Raúl era flaquito, y los que lo han interpretado también, con excepción de Pablito Dávila, que era un poco gordito, y me decían: “El Rigucho era flaco y vos eres gordito” y les dije “ha engordado, pues”.

Me costó mucho sacar la esencia del personaje, pero creo que lo he logrado, porque es tierno y esa ternura no la he perdido cuando lo interpreto, yo me pongo el casquito y me transformo.

LG: ¿En algún momento Rigucho sobrepasó a Daniel Gonzales?

D: Sí, con el Rigucho hemos volteado teatros llenos y el cariño de la gente es lo que más me llena. El personaje es increíble, yo creo que cuando me muera tiene que haber otro Rigucho, no tiene que morir, es el personaje que más años se ha mantenido, es un patrimonio paceño, con todo respeto a otros personajes, como también los de David Santalla.

LG: ¿Daniel Gonzales siente celos del Rigucho?

D: Para nada… aunque no sé si son celos, pero lo que me pasa es que, por ejemplo, no voy mucho a recepciones sociales, porque no me invitan como Daniel Gonzales, si no como Rigucho y no falta quien se acerque y me diga. “Che, Rigucho, subí al escenario a contar algunos chistes”.

LG: ¿Qué diferencia hay entre Daniel y el Rigucho?

D: ¡Huy! (sonríe), Daniel no es mujeriego, el Rigucho sí, Daniel no es revendedor, el Rigucho es gran revendedor. Daniel tiene poca ternura, Rigucho es demasiado tierno. El Rigucho es de los mil oficios, no le interesa estar barriendo la calle o vender algo, es bonachón, somos muy diferentes.

MENSAJE A LOS JÓVENES

D: Que no sean tan choleros (sonríe). Creo que hay que saber valorar un poco de dónde venimos y hacia dónde vamos, porque lamentablemente da pena darse cuenta de que nadie se acuerde de los grandes actores del teatro, como Raúl Salmón, Agar Delos, Rafo Mori y Lucho Espinoza. Si no hubieran sido otros actores que le dieron vida, yo también (Rigucho) ya me hubiera muerto. El teatro tiene historia y hay que respetarla. Veo que hay un festival de teatro “Raúl Salmón” y nunca se ha presentado una obra de él, sólo es el nombre.

Ojalá que los jóvenes valoren más el teatro, puede que sea bueno o malo, que les guste o no, pero hay que valorar y saber respetar a todos esos actores que han dejado su vida en el escenario.

SUFRE MUCHO POR…

¿El Rigucho está enamorado?

D: Sí, de su eterno amor que es la Ismicha, otro personaje de “Plato paceño” y lamentablemente en la obra “Miss Chijini” la embarazan y el Rigucho sufre mucho… y le dice a la Ismicha: “Si ese hombre se va… acá siempre tendrás a un hombre como padre, como hermano”, de esa manera demuestra su amor, Raúl (Salmón) lo pone más humano.

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