La ópera rock, una apuesta vanguardista de los últimos días de Jesús, compuesta en 1970 y llevada al cine en 1973, fue revivida en Cochabamba por más de 120 artistas entre músicos, actores y personal de apoyo. La música estuvo a cargo de la Orquesta Filarmónica de Cochabamba, que incluyó en su plantel de artistas al grupo de rock “A Pie” y a destacados solistas como Daniel Deglane, con una aplaudida interpretación de Jesús, lo mismo que Juan Carlos “Cayo” Guerra, que llevó el contrapunto con Judas, y María Salazar, en la voz de María Magdalena.
Pese a que su papel de Herodes aparece en sólo una escena de no más de cinco minutos, uno de los más aplaudidos de la noche fue Guery Sandóval “El Pocholo”. Envuelto en un traje que asemejaba un pasante de fraternidad con mixturas y serpentinas, interpretó la canción que da el nombre a la ópera “Superstar”.
Las voces bajas de Caifás (Germán Morales) y barítona de Pilatos (Enrique Araoz) marcaban instantes de tensión en el argumento. Magdalena vestida de rojo, con chamarra de cuero y cartera, era la voz femenina que endulzaba el ambiente.
La Orquesta estuvo dirigida por Augusto Guzmán y la parte escénica por Ivette Mercado y Carmen Collazos. Según Guzmán, la idea la gestó él con Francisco Bayá y Monica Briançon en agosto del año pasado.
Fue una ópera en la que la actuación justificó el tiempo de trabajo de todo el elenco (comenzaron a principios de año), en un escenario en el que marcó su peso el juego de luces y sombras.
Si algo hay que criticar es el sonido, afectado en varias ocasiones por las interferencias de ruido, además de la falta de uniformidad en el volumen.
La ópera tendrá nuevas funciones hoy y mañana en El Portal.
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