Estudiantes exponen nuevas técnicas en el Mario Unzueta

La creatividad e ingenio de los estudiantes de tercero y cuarto de la Escuela de Artes Plásticas se han puesto a consideración del público de Cochabamba.

En el salón Mario Unzueta, de la Casa de la Cultura, destacan pinturas y esculturas con técnicas de serigrafía y pintado al óleo. Uno de los alumnos detalla que estas técnicas son impulsadas para dar creatividad a una nueva tendencia en el arte que se hace visible en lo estético.

“El estudiante demuestra su formación en la pintura, escultura y dibujo”, sostuvo Héctor Rasguido alumno de la Escuela Superior de Artes Plásticas. Señaló que el enfoque de estos cuadros está referido a la figura humana, con la idea de enseñar y aprender una pintura en movimiento.

“Explotamos la figura humana, ya que en el último curso debe haber un dominio. Un artísta plástico toma en cuenta todo los movimientos expresivos y característicos”, insistió.

Existen ciertas características que denotan su esplendor en la demostración de sus técnicas, la perspectiva, el dibujo, la composición, pintura, lo estético, la escultura, la serigrafía, el moldeado entre otras tendencias que contienen ideas contemporáneas reflejadas en las pinturas al desnudo.

Es así que a partir del tercer año los alumnos determinan en qué especialidad desean ser titulados. En este caso: la técnica de la pintura y escultura.

“Ahora estamos realizando una exposicion de pinturas y esculturas de alumnos de tercer y cuarto año, del turno de la tarde y la noche”, señaló Héctor Rasguido. Asimismo indicó que el tiempo invertido para este tipo de estudio es de cuatro años. Las personas aptas para formar parte de está casa superior de estudios no categorizan edades, ni mucho menos discapacidades en las personas; ya que intentan formar alumnos con desarrollo social de igualdad, con creaciones propias, sugeridas por experiencias vivenciales.

Asumiendo que el crear es una actividad de todos, un artista es y será considerado por su creación y no por su aspecto o apariencia. El precio es de 80 bolivianos, que se paga de forma única y anual.

La Escuela expone el resultado de su trabajo. Forma personas de todas las edades y dificultades especiales, incluyendo profesionales que deseen dedicarse a las actividades artísticas.