OH!: ¿Cuán determinante ha sido el hecho de haber crecido con un padre comediante?
Fue fundamental, desde que tengo uso de razón, en la familia estuvimos empapados del ambiente artístico, tal como sucede, pienso, con las familias circenses. El padre trapecista, el hijo trapecista, el nieto trapecista y así sucesivamente. Familias en las que cada miembro de una nueva generación nace con la habilidad y tiene a su disposición un campo formado para desarrollarse. Si decide dedicarse al rubro, comienza el camino con ventaja, pero a la vez con el duro desafío de ser mejor y abarcar un ámbito más grande que el de su antecesor.
OH!: ¿Cómo ha sido crecer en un ambiente artístico?
Era algo normal. A medida que iba creciendo no había diferencia alguna entre la vida que llevaban mis amigos u otros chicos. Pero me pongo a pensar, veo hacia atrás y me doy cuenta que fue muy importante estar inmerso siempre en el campo artístico, ya que en materia de teatro humorístico hemos visto y experimentado mucho, tanto experiencias personales como las de nuestros padres (incluyo en el comentario a mi hermano y a los hijos de Adolfo Mier y Hugo Daza, socios de mi padre). En el presente esas experiencias las veo reflejadas en la acumulación de un bagaje de vivencias que nos han generado una especie de sensibilidad para saber dónde o cómo encarar una situación para desencadenar con un buen remate humorístico, o la capacidad para saber aprovechar una circunstancia y crear el momento gracioso.
OH!: ¿A qué edad comenzó a formar parte del elenco de Chaplin Show?
Oficialmente soy parte del elenco de Chaplin desde el 2006 (a mis 25 años), pero mi formación data desde siempre, ya que en los 90 formé parte de Chaplin Niños (el elenco infantil), y a partir de 2000 la Sub 20 (elenco de jóvenes).
OH!: ¿Cómo influye en su carrera de humorista el que su padre sea uno de los pioneros en el país?
Mi situación se plantea de un modo interesante, ya que nací con algo de ventaja en la materia, y por tanto el desafío y las expectativas de crecimiento son mayores.
Para ampliar un poco ésta, y la idea que hago referencia en la primer pregunta, me gustaría explicar cómo veo la situación con un ejemplo: Dentro del ambiente del fútbol, vemos a menudo a dos tipos de chicos, los que nacen con talento y los que no. El pensamiento lógico lleva a deducir que los talentosos se esforzarán menos que los otros y cuando ambos lleguen a nivelarse en un punto, los menos talentosos, gracias al camino de esfuerzo, tesón y trabajo, tendrán más capacidad para prevalecer en el campo del fútbol profesional y surgir. Los otros, al nacer con el don y la técnica, se habrán relajado, tal vez lleguen, pero con menos fuerza.
Ahora, si aquel que nace con el don, invierte la misma cantidad de esfuerzo y dedicación que el menos talentoso y aboca todas sus fuerzas y energías a mejorar, llegará a un nivel superlativo y es muy probable que sea buscado por un empresario europeo para jugar usando la camiseta numero 10 del FC Barcelona o la 7 del Real Madrid. Redondeando la idea, un chico nació con la habilidad y el otro desarrolló capacidad, el virtuoso es aquel que desarrolla la capacidad sabiendo de su habilidad.
OH!: ¿Dentro de cuál se clasifica Ud.?
Puntualizando en mi caso no se si llegaré a desarrollar una capacidad como para consagrarme como un virtuoso del humor, trato de tomar conciencia de mis posibilidades y de lo que tengo por hacer.
OH!: ¿Qué importancia tiene la actuación en su vida?
Comenzó como un hobbie, ya que no fue algo buscado, sino que lo tuve siempre, pero al momento de decidir dedicarme a nivel de carrera, se convirtió en una profesión, con todo el esfuerzo, dedicación y esmero que ello demanda e implica.
OH!: ¿Cuánto tiempo le dedica?
Los días y las horas de actuación por lo general van de miércoles a sábado con una duración de dos horas y media a tres, más o menos. Fuera de ello, las épocas en las que preparamos una obra, requieren estar con la cabeza todo el tiempo metida en el espectáculo y cada uno de los detalles. Una vez estrenado el show, no podemos relajarnos porque siempre vamos puliendo cosas. En resumen, el tiempo que le dedico es casi constante y difícil de cuantificar, siempre hay algo que hacer en pos de mejorar el espectáculo.
OH!: Más allá de la comedia ¿se plantea pasar a otras áreas en la actuación?
No me lo he planteado y no se si me sienta cómodo haciéndolo. Una vez me invitaron a protagonizar un corto dramático y la experiencia fue interesante, pero a mi me gusta generar alegría.
OH!: ¿Ha recibido formación académica para ser actor?
No. Recibí formación académica por otro lado, soy Licenciado en Diseño Gráfico, pero al cursar una carrera universitaria aprendí a desarrollar espíritu de investigación y el gusto por la lectura. Además, gracias al internet, voy ampliando conocimientos todo el tiempo.
OH!: ¿Qué considera debe tener un humorista para ser bueno?
Pura y exclusiva dedicación. No solamente con el humor sino con todo lo que uno decide hacer en la vida. Siguiendo con el ejemplo de los chicos futbolistas, puedo nacer sin habilidad alguna, pero por el hecho de ser humano, gracias al libre albedrío, tengo la posibilidad de desarrollar capacidad en lo que elija hacer. Cuánto más energía y concentración dedique a algo que quiero lograr, el grado de perfección para consagrarme será mayor. En relación a esto siempre tengo presentes imágenes de personas que pintan obras de arte con los pies al no tener brazos, ejemplos que hablan de esfuerzo y sacrificio para la consagración de una idea.
OH!: ¿Se ha encontrado con un público tosco, difícil de hacer reír?
Claro, muchas veces, es una de las cosas que forman parte de la profesión de humorista. Como seguramente a la cajera del súper, o al cajero del banco les tocan clientes complicados, o la periodista que se encuentra con un entrevistado denso y difícil, la telefonista de una compañía de celulares que se encuentra con clientes “reclamones” y exigentes, el oficinista que tiene un compañero o jefe complicado, etc. El público fácil, lindo y ameno vendría a ser como el postre de una comida, un pie de limón, digamos, pero la gama de alimentos va más allá del postre. El público difícil lo asocio a las verduras, nada agradables a la vista, poca predisposición para comerlas, pero son parte esencial de la alimentación, tienen las vitaminas que el organismo necesita. Toma trabajo acostumbrarse a ellas, pero una vez que haces el esfuerzo y las aceptas, en algún punto te llegan a gustar. Siempre lo fácil es comer el postre o recibir el premio, pero para que ello sea una gratificación real, detrás están el trabajo y el esfuerzo. Con esto no quiero decir que una cosa sea fea y la otra bonita, o que sea buena y la otra mala; simplemente son parte de los ciclos de la vida y aceptarlos por igual te lleva a comprender, aceptar y tomar conciencia del momento presente.
OH!: ¿Qué siente segundos antes de salir en escena?
No busco sentir nada, busco el silencio y concentración para prestarle cuerpo al personaje que voy a interpretar.
OH!: ¿Cómo ve a los shows de humor en Bolivia?
Admiro mucho lo que se ha generado en base a Tra La La Show. Las compañías de teatro humorístico del país que nacieron a partir de esta casa, conservan su esencia. Es muy gratificante conocer personas del extranjero que visitan Bolivia o ven alguno de estos espectáculos afuera del país y se sorprenden al encontrarse con algo distinto a lo que están acostumbrados a ver.
OH!: Además de la actuación se encuentra haciendo la carrear para ser Director Técnico de Fútbol. ¿Cómo?
Hay una anécdota que siempre comento cuando me hacen la pregunta, y es del primer día de clases, cuando el docente nos dio la orden clásica del inicio de un curso: –Póngase de pie, preséntese y diga que lo motivó a estudiar la carrera–. Cuando llegó mi turno, me paré y me presenté: – Buenas noches, soy Bruno Ferrante y estoy acá porque me parezco a Puyol y quiero ser como Guardiola–. Sucede que vengo de una familia muy ligada al deporte, con mi padre y mi hermano seguimos mucho fútbol y lo practicamos. El papá de mi papá fue director técnico y en su tiempo estuvo ligado al ambiente deportivo. Además la familia por el lado de mi mamá está llena de deportistas, de los que destacan mi primo Fadrique Iglesias en atletismo, y Jorge Ríos en natación. Siempre me llamó la atención hacer algo vinculado al deporte, por mi capacidad actoral me interesaba el periodismo deportivo, pero la carrera no se dictaba en el medio. Hasta que me enteré que la Universidad del Fútbol ofrecía la carrera de Entrenador de Fútbol y sin pensarlo dos veces me inscribí. Es una carrera que dura dos años, me encuentro cursando el segundo, ya tengo el título para dirigir en divisiones inferiores y si todo sale bien, el próximo año me estaré graduando para dirigir fútbol profesional. Nunca me imaginé estar sentado en el banquillo, pero hace poco tuve la gran oportunidad de trabajar en el Club Oriente Petrolero, dirigiendo sus divisiones Sub 13 y la experiencia fue muy enriquecedora.
Perfil
BRUNO FERRANTE
Carismático y gracioso, así es Bruno Ferrante García, que a todas luces refleja la herencia y habilidad de su padre, el reconocido comediante Ernesto Ferrante. Sin embargo, para él eso no basta, su carrera de actor está respaldada por el mucho esfuerzo que demanda y cuenta que para él es un duro desafío ser mejor. Aunque estudió para diseñador gráfico, la actuación es un trabajo de dedicación completa pero también ha encontrado tiempo para otra pasión heredada: el fútbol. Bruno, paralelamente a la actuación, está estudiando para ser Director Técnico de este deporte.
"Estoy agradecido de lo que soy, la influencia de mi padre es muy importante en mi vida, no solamente en el plano de la carrera como humorista, sino de lo que soy como ser humano"
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