El Festival Internacional de Teatro de Santa Cruz se nutre de diversos elementos para mantener el prestigio y nivel que lo convierten en el evento teatral más importante del país; el público y su apoyo es uno de ellos. Sin embargo, a lo largo de la cita también cobraron protagonismo diversos personajes que se destacaron desde su lugar de trabajo y que contribuyeron a dar realce al evento teatral.
Uno de los principales fue Guillermo Sicodowska, que, al igual que Luis Bredow, actuó en tres obras durante el festival. El actor cruceño se robó el espectáculo en la obra de apertura, El corral de Bernarda, con su interpretación de Adela; hizo deleitar a los niños con Do, Re, Mí, y se abrió el telón y se lució en su actuación en Septiembre (en la que incluso se atrevió a recriminar a los jóvenes del público que no guardaron silencio).
Sandra Peña también dio que hablar al actuar en la obra mexicana Tanto soñé de ti y el cochabambino Diego Aramburo al dirigir la argentina King Kong Palace. Alejandro Molina fue otro protagonista al presentar el libro Las cartas del cabo, que contiene la obra que presentó con Proyecto Bufo.
Sicodowska trabaja en el montaje de Malinche, dirige junto al uruguayo Agustín Separovich, la obra contará con la participación de Paula López. Asimismo, el artista señaló que prepara QQQ (Quisiera Quererte Querido) y que comenzará la tercera versión de su taller de actuación La magia de ser otro ser, a partir de mañana,
Opinión
El teatro boliviano está encaminado
Claudia Eid / Actriz
El Festival de Teatro de Santa Cruz siempre ha servido como impulsor del teatro nacional. En esta versión, con una gran y buena oferta de grupos bolivianos, se puede apreciar nuestro estado. Los referentes a tomar en cuenta son las obras Bonitas, Las relaciones de Clara, Sólo con esto, Las cartas del cabo y Mis muy privados festivales mesiánicos.
Por lo menos en la mitad de las obras bolivianas programadas para el festival hay textos propios, dramaturgia boliviana; muy buen síntoma que refleja nuestro crecimiento como autores y solidifica el teatro nacional.
Sin embargo, dentro de este proceso no se ve todavía una dramaturgia bien estructurada, en la mayoría de los casos se trata de obras segmentadas, dispersas, que funcionan por su interacción con el público, pero que no son textos terminados con estructuras fuertes y sólidas, como en el caso de Bonitas. Pareciera que nuestra palabra todavía no puede ser clara y que nuestras herramientas dramatúrgicas son escasas; es quizás el campo del teatro en el que menos formación hemos tenido en Bolivia. En Las cartas del cabo se ve una estructura más pensada, pero termina diluyéndose en su propia historia. Sólo con esto, aunque tiene una estructura segmentada, tiene fuerza y es más efectiva con el público.
Pero más allá de la dramaturgia se ve un crecimiento en las puestas en escena, los directores, que en su mayoría han comenzado como actores, amplían la mirada con puestas en escenas mejor resueltas, limpias y efectivas. La dirección también está en proceso de crecimiento. En dirección y dramaturgia, hay quienes encabezan la marcha y eso también es alentador.
Se destacaron
Luis Jiménez
Director y dramaturgo
En poco tiempo logró montar una de las obras más vistas del festival, El corral de Bernarda, que abrió la cita teatral. El español dirigió magistralmente a un elenco de nueve actores nacionales.
Ana María Cores
Actriz y cantante
Conmovió a muchos con su actuación en el musical Juana Azurduy, basado en la vida de la heroína de la independencia. Cores fue la artífice de un homenaje de integración entre bolivianos y argentinos.
Marcos Malavia
Actor, director y dramaturgo
Volvió a ser protagonista del festival. Su labor en la obra Corps-Texto impresionó al público. Además dirigió Ópera Pánico, con alumnos de la Escuela Nacional de Teatro; tuvo buenos comentarios.
Gatomaquia
Obra de Uruguay
Fue uno de los espectáculos más comentados del festival. Las andanzas de los gatos Marramaquiz y Micifuz, quienes se enfrentan por el amor de Zapaquilda, logró atraer al público local.
Altoteatro
Elenco nacional
Con las seis presentaciones de la obra Sólo con esto (cuatro en provincias y dos en la capital cruceña), el elenco, dirigido por Freddy Chipana, fue uno de los más activos en esta cita con el teatro.
Dermot Murphy
Dramaturgo irlandés
El autor de El cóndor y la niña trabaja hace más de 20 años con teatro en varios pueblos de Bolivia. Hizo posible que el destacado artista Stuart Hopps logre dirigir la obra. Fue distinguido por APAC.
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