El charango
El
instrumento de cuerda andino conocido como charango apuesta a cumplir
los requisitos para convertirse en Patrimonio Cultural Inmaterial. Fue
postulado por el Ministerio de Culturas a la Unesco el 2003. El charango
parecido a una pequeña guitarra de cinco cuerdas dobles, que consta de
una caja de resonancia, suele construirse en Bolivia con el caparazón de
un armadillo. Según la justificación presentada por el Gobierno, este
instrumento se creó en el siglo XVI en Potosí, cuando esta ciudad era
una de las más pobladas del mundo gracias a su riqueza de plata y que,
tras la colonia española, pasó en 1825 a formar parte de la naciente
República de Bolivia.
Pujllay y Ayarichi
Este
2014 se cumple el Año del Pujllay, una actividad programada para
promocionar masivamente su potencial cultural y fortalecer su
candidatura ante la Unesco. El pujllay y el ayarichi son practicados por
diversas comunidades indígenas de la cultura Yampara. Su candidatura
concierne a dos formas culturales que son complementarias y forman un
todo. El pujllay es ejecutado en un ritual que celebra la renovación de
la vida y la abundancia traída por las lluvias. A través de varios
procedimientos rituales, construcciones sonoras, el baile y los trajes
evocan al “Tata Pujllay”, entidad “demoníaca” y fecunda que posee una
energía desbordante y que es descrita a veces como un caballo o jinete.
El Gran Poder
Autoridades
impulsan la inscripción como Patrimonio de la Humanidad a la entrada de
Gran Poder como reconocimiento a su aporte en la presentación de
valores y tradiciones de la danza y el folklore paceño y boliviano, el
incentivo a la conservación y la valoración de la identidad nacional. El
origen del Gran Poder se remonta al 8 de diciembre de 1663, sin embargo
en 1923 surgieron las primeras fraternidades folklóricas. En 1952 se
realizó un festival departamental de danzas paceñas en el estadio, donde
surgió la idea de desarrollar una entrada más apoteósica y organizada. Actualmente, esta fiesta se ha convertido en un evento departamental con más de 58 fraternidades.
El Ekeko y las Alasitas
La
figura del Ekeko y la fiesta de Alasitas postularon todavía sin logros,
a ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad registrado por la Unesco.
El Ekeko es un dios de la abundancia, fecundidad y alegría que recibe
culto principalmente en el departamento de La Paz. Según la creencia, el
ídolo provee de abundancia al hogar donde se le tributan ofrendas de
alcohol y cigarrillos. Toma la forma de un varón sonriente, ligeramente
obeso, vestido con ropas típicas del altiplano y cargando gran cantidad
de bultos de alimentos. A esta figura cada año le acompaña la fiesta de
las miniaturas, cuya creencia es comprar productos pequeños para tener
abundancia todo el año.
Parque Nacional Sajama
El
reservorio más antiguo de Bolivia, fue declarado como Patrimonio
Nacional en 1939. Está ubicado en el departamento de Oruro con 100.230
hectáreas de extensión y cuenta con el pico nevado más elevado del país,
con una altura de 6.549 m. Región rica en aguas termales, posee un
bosque de keñuales, yaretales -usados por la gente del lugar como
combustible-, tholas, paja brava y variedad de especies de fauna.
Huellas del tiempo
Cal
Orcko (de la voz quechua Cal Urqu, ‘Cerro de Cal’) es un yacimiento
paleontológico de Bolivia, hallada en la cantera de una fábrica de
cemento, cercano a la ciudad de Sucre, Chuquisaca. Es el sitio con
huellas de dinosaurios más visibles en el mundo, ya que contiene más de
5.000 huellas de 294 especies de dinosaurios. El descubrimiento es una
enorme contribución a la historia y a la ciencia.
Lago Titicaca
Autoridades
de Perú y Bolivia buscan convertir a lago Titicaca en un Patrimonio
Mixto de la Humanidad, al ser una fusión de culturas prehispánicas con
belleza natural que alberga variadas especies de flora y fauna.
Considerado como el lago navegable más alto del mundo (3.812 msnm), este
bien no sólo postula a la Unesco sino a convertirse en una más de las
maravillas del mundo.
Ruinas de Incachaca
Una
antigua planta hidroeléctrica ubicada a 90 kilómetros de Cochabamba es
el umbral del ingreso al pasado. Las construcciones antiguas de la época
prehispánica son huellas de la forma de vida antes de la colonia. Las
ruinas se constituyen además en un recurso natural de belleza sin igual
con impresionantes cascadas semi-subterráneas y pozas naturales de aguas
cristalinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario