miércoles, 29 de octubre de 2014

Un proyecto recuperará más de 300 obras de Adrián Patiño

Los familiares del compositor boliviano Adrián Patiño y el Conservatorio Plurinacional de Música se unen en un proyecto para recuperar el legado que dejó el músico. Para ello seleccionarán y catalogarán las más de 300 obras, entre ellas varias piezas inéditas, que se conservan en su casa en La Paz.
"Queremos hacer una catalogación y poner en orden todas las obras de mi abuelo Adrián Patiño para una posible edición e, incluso, publicación de las que sean inéditas. Ese es el objetivo”, contó el escritor Alfonso Murillo Patiño, nieto del compositor.
Murillo dijo que para emprender este proyecto se buscó la ayuda del Conservatorio Plurinacional de Música, como una institución indicada para el proyecto, ya que existen varias partituras originales, inéditas y borradores que requieren un trabajo profesional.
El resultado final será un catálogo con el estudio minucioso de las obras y de las partituras unificadas. Además, se identificará las obras que existen, a cuáles pertenecen las hojas sueltas y cuáles son inéditas. "Como familia, no lo podemos hacer, porque no somos peritos musicales. Por eso solicitamos el apoyo del Conservatorio. Ya el año pasado, la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia estaba haciendo ese trabajo, pero quedó inconcluso”, explicó.
Adrián Patiño (1895-1951) fue un destacado músico, compositor y director de bandas. Compuso piezas como Nevando está, Cariñito, Kunuskiu, Irpastay, La huerta, Despierta amorcito y Mi pastorcita, entre otras.


La hija del músico, Blanca Patiño, quien falleció en 2003, realizó un inventario y contabilizó más de 300 obras sin catalogar. Sin embargo, aún existen partituras sin nombre, sueltas y otras que con el tiempo se fueron deteriorando.
"Queremos hacer una sistematización de las obras de acuerdo a su contenido, al ritmo, a los acordes, a todos esos elementos musicales. Hay obras que consideramos importantes y que deben ser catalogadas, eso requiere un trabajo minucioso y profesional”, agregó su nieto.
El nieto de Patiño indicó que se comunicaron con Oldrich Halas, rector del Conservatorio, para iniciar el proyecto y esperan una respuesta formal y escrita con la propuesta de la institución. "Podrían venir (los técnicos) a casa porque todos los archivos están en nuestro domicilio”, añadió.
Por su parte, Halas sostuvo que el Conservatorio está coordinando y organizando el equipo que se encargará de guiar este proyecto. Según el rector de esa institución se tiene previsto comenzar el trabajo de catalogación el próximo año. "Haremos el trabajo de catalogación porque la familia sólo tiene los manuscritos. Tenemos que saber exactamente qué es lo que dejó el compositor, esa sería la primera etapa”, adelantó.
El compositor boliviano Nicolás Suárez aplaudió la iniciativa de recuperar las obras de Patiño. "Creo que será una labor muy importante, hacer una catalogación de las obras y la transcripción de las que no se tiene todavía. Patiño es uno de los compositores más importantes que tenemos en Bolivia, ha sido un maestro de la composición para música de banda”, afirmó.
Halas agregó que para la institución es importante participar en este proyecto por la relevancia que tiene Patiño en la historia de la música de Bolivia. "Es importante realizar el registro y recuperar las obras que no se conocen, muchas inéditas y que se puedan publicar en un catálogo”, enfatizó.

La vida y obra de Adrián Patiño
Nació el 19 de febrero de 1895, en La Paz. Falleció en 1951. Fue un destacado músico, compositor y director de bandas. Estudió en el Conservatorio de Música de La Paz, donde egresó como profesor de Instrumentos de Viento. Fue profesor de música y coros en las escuelas municipales de La Paz. Como intérprete fue clarinetista, oboísta y pianista.
Compuso una variedad de huayños, cuecas, bailecitos, marchas, himnos, valses y canciones. Sus obras más destacadas son: Nevando está, Cariñito, Chayñita, Kunuskiu, Irpastay, La Huerta, Despierta amorcito, Mi pastorcita y otros.
Como era militar compuso varias marchas e himnos para diferentes instituciones, entre las más conocidas están Marcha Presidencial, Himno del Colegio Militar, Himno del Deportista Boliviano, Himno a la Cruz Roja, Marcha Coral Pre-Militar, e Himno del Policía.
Ingresó al Ejército al ser designado director de la Banda de Música del Regimiento Cuarto de Infantería. Se desempeñó como director General de Bandas del Ejército (1938). Llegó al grado de teniente coronel de música (1941).

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