Las presentaciones estarán divididas en dos partes. En la primera el elenco oficial interpretará la obra completa Pedro y el lobo del compositor ruso Sergéi Prokófiev. “La importancia de Pedro y el lobo radica más que nada en su función pedagógica. Sirve para introducir a los niños a la música sinfónica y presentar instrumentos de la orquesta no muy conocidos”, explicó el director.
Cada uno de los personajes de la obra está representado por uno de estos instrumentos: fagot, flauta traversa, oboe, clarinete, trompas o cornos franceses y timbales. Pedro, al ser el protagonista, es encarnado por violín, violas, violonchelos y contrabajo. Paralelamente un narrador cuenta la historia, identifica a los protagonistas y guía el desarrollo de la obra. El actor Cristian Mercado cumplirá con ese papel.
La pieza fue compuesta en 1936, tras el regreso de su autor a la Unión Soviética. Prokófiev recibió el encargo del Centro de Teatro Infantil de Moscú de escribir una sinfonía musical para niños. La intención era cultivar gustos musicales en los niños desde los primeros años de la escuela. Aunque en su estreno no llamó mucho la atención, posteriormente se interpretó en todo el mundo.
“Pese a que está pensada principalmente para niños, Pedro y el lobo tiene gran éxito entre los adultos, ya que presenta instrumentos no muy comunes fuera de las orquesta”, agregó Otazo. El director indicó que la segunda parte del programa estará conformada por “obras musicalmente más complejas”, aunque sin dejar de lado el atractivo de las mismas para el público infantil.
La primera pieza es El aprendiz de hechicero, del compositor francés Paul Abraham Dukas. La obra busca evocar, sin palabras, las imágenes del poema homónimo de Johann Wolfgang von Goethe en el que está basada.
Otazo admitió que aún no se definió si se explicará la trama de la historia o no antes de la ejecución. El aprendiz de hechicero cuenta las desventuras de un estudiante de las artes mágicas que encanta una escoba. El conjuro se sale de control y el alumno debe ser salvado por su maestro.
A ésta le seguirá la obertura de la ópera Hansel y Gretel, de Engelbert Humperdinck, basada en el cuento de hadas alemán recuperado por los hermanos Grimm.
Otazo indicó que estas composiciones presentan una influencia “wagneriana” en su estructura. “Es decir, los temas son simples, inspirados en cuentos y leyendas populares, pero con arreglos especiales que los convierten en obras maestras”, agregó.
Los conciertos tendrán una hora de duración y comenzarán a las 20.00. Las entradas se podrán adquirir en el Centro Sinfónico Nacional (C. Ayacucho 366). El costo es de Bs 50, 70 y 100. El director de la Fundación Orquesta Sinfónica, Flavio Machicado, adelantó que se realizará una promoción para niños de escasos recursos.
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