La puesta en escena lleva el nombre de “Latináfrica” y comprende un recorrido por algunos países de Sudamérica que tienen a la cordillera como columna vertebral. Se trata de una propuesta de danza que retrata a los afrodescendientes y su aporte a la interculturalidad y mestizaje en Sudamérica. “Reconoceremos el aporte de las generaciones que fueron secuestradas del África para ser traídas a las colonias del nuevo mundo y que una vez que se fundaron las repúblicas se quedaron y aportaron con su música danza, religión y tradiciones a la cultura Latinoamericana”, destacó Mazuelos.
En estas presentaciones, la Saya Afroboliviana no solo tendrá participación musical, sino contará con su propia voz y experiencia su historia y realidad en el país, precisó la directora, quien resaltó que a través de la obra se pretende reflejar la influencia de la cultura afro en Latinoamérica.
“Le pusimos el nombre de Latináfrica, pues todos los países de la cordillera de Los Andes: Ecuador, Colombia, Perú, Argentina y Uruguay han recibido una influencia muy importante en sus manifestaciones musicales y dancísticas de estas culturas que fueron traídas de manera forzosa durante la colonia. Sin embargo lograron mantener y aportar a la riqueza musical de Sud América. Para conocer su influencia en Bolivia, invitamos especialmente a la Saya afroboliviana Tambor Mayor”, aseveró.
Para mayor información sobre el espectáculo, pueden llamar a los celulares 79153333 – 77248143 o visitar su página en: Compañía Nacional de Danzas “Conadanz”.
La Compañía Nacional de Danza se fundó el 18 de enero de 1993. Ya son 23 años que realiza un trabajo intenso de recopilación y reposición de música y danza de las diversas culturas del país, marcando así “un antes y un después” en la historia del folclore boliviano.
En la pasada gestión 2015, fue ganadora del premio Eduardo Avaroa en la categoría danzas escénicas con la obra “Surimana” de la cultura Kallawaya, una propuesta escénica de su directora, Yolanda Mazuelos, la coreografía de Carmen Castro y la inspiración y composición musical del maestro Rolando Encinas, director de Música de Maestros, y el artista japonés Koji Hishimoto.
Este año, la entidad, en su gran inquietud por seguir aportando a la cultura nacional, abrió el curso formativo para niños y jóvenes que gusten de este arte en su nuevo local bajo los mismos objetivos: Investigar, reponer y difundir las expresiones de danza de las diferentes culturas indígenas y mestizas del país, así como poner en escena historias y leyendas recogidas tanto de la historia o de la narrativa oral que se tiene en la población.
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