Luego de permanecer varios días internado en una clínica de la ciudad, el artista plástico Alberto “Ch’ilo” Prada Cárdenas falleció la noche de este domingo.
Parte de una notable familia de artistas --sobrino del maestro Ponciano Cárdenas y hermano de Fernando Prada, ambos radicados hace años en Argentina--, Ch’ilo Prada fue uno de los escultores cochabambinos que consiguió 10 premios municipales.
Su primer reconocimiento lo obtuvo en 1971 al ganar el segundo premio de escultura del Salón Municipal.
Nacido en Cochabamba el 4 de diciembre de 1944, Ch’ilo vivió algún tiempo en Argentina donde trabajó en el taller de Ponciano y en Cochabamba pasó también por el taller de Mario Unzueta.
“Esculto-pintura”
Luego de dedicarse un tiempo a la creación de joyas en diferentes metales, comenzó a cultivar la “esculto-pintura”, una técnica de la que se consideró su creador y que realizó prácticamente hasta su muerte.
Caracterizada por un repujado generalmente hecho sobre una lámina de cobre o de latón, Prada unía al metal óleo u otra base de pintura para conseguir sus cuadros de “esculto-pintura”.
El artista también hacía escultura en cerámica y mosaicos de diferentes dimensiones donde predominaban las figuras animales: cóndores, caballos y toros, eran sus favoritos.
Varias de sus obras están en colecciones privadas y también han sido puestas en lugares públicos, como las figuras tiawanacotas que adornaban las paredes del Cine Bustillo de la década de los 80.
En septiembre pasado, la Asociación Boliviana de Artistas Plásticos filial Cochabamba (Abap) le rindió un merecido homenaje en vida con una exposición individual presentada en el salón Gíldaro Antezana y denominada “Homenaje a la Trayectoria Artística”.
Parte de la obra reciente de Prada Cárdenas debía ser expuesta en “Solo Esculturas” que se presenta en la Casona Santivañez hasta el 14 de noviembre próximo. Sin embargo, debido a su estado de salud y su sorpresiva internación no pudo llevar su obra.
Trabajo intenso y prolífico
“Sin duda alguna que habíamos caído en cuenta como Asociación (Abap) de que correspondía rendirle un homenaje luego que trabajó intensamente y cultivó una particularidad, una técnica que él insistía mucho en ser de su creación: la esculto-pintura”, dijo ayer Benjamín Lafuente, presidente de Abap Cochabamba.
Ch’ilo Prada se encontraba trabajando junto a Abap en algunos proyectos grandes como la elaboración de un libro sobre las artes plásticas.
Hasta ayer, la asociación junto a los hijos del artista gestionaban con la Alcaldía para que Prada pueda ser enterrado en el Patio de los Artistas Notables del Cementerio General, “dado los méritos que él reunió”.
El cuerpo del artista es velado en Samay Wasi (calle México entre Hamiraya y Tumusla), donde a las 14:00 se celebrará una misa y posteriormente sus restos serán trasladados al cementerio.
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