Programa IV: Es la cuarta presentación de la temporada 2011 de la Sinfónica e incluirá videos.
No se trata de imágenes pornográficas, pero sí con cierto contenido erótico que, por precaución, es mejor evitar que vean los menores de edad. La frase corresponde a David Händel, director de la Orquesta Sinfónica Nacional, que desde las 20.00 de hoy presenta la cantata profana Carmina Burana, de Carl Orff.
Utilizada hasta el hartazgo por editores audiovisuales, sobre todo la obertura, que los operadores en televisión suelen emplear de fondo tanto para desastres como para notas de color o transiciones en el noticiero, la composición que Orff hiciera entre 1935 y 1936 vendrá acompañada de imágenes.
IMÁGENES MÁGICAS. La época en que fue compuesta coincide con los últimos años del cine silente y es bastante probable que el compositor bávaro hubiera estado influido, entre otras expresiones, por el impresionismo que tenía a Friedrich Wilhelm Murnau como uno de sus exponentes.
Orff concibió su cantata profana basada en cantos goliardos, clérigos vagabundos y estudiantes universitarios nómadas de los siglos XII y XIII que reunió con la idea, apuntada en la partitura original, de que la ejecución fuese acompañada por imágenes mágicas.
Como se desconoce a ciencia cierta a qué se refería el muniqués, además de que los versos goliardos solían estar dedicados al vino, el hedonismo y las pullas al clero, se optó por mostrar fotografías y otros soportes sensuales en esta representación junto a la Sociedad Coral.
Las funciones, hasta el jueves, son en el Centro Sinfónico Nacional, situado en la Ayacucho, frente al Banco Central.
Para destacar
Karina Stepanian (soprano), José Duarte (tenor) y Giovanno Salas (barítono) serán solistas.
Las entradas valen Bs 100, Bs 70 y Bs 50. Venta: Todotix, MegaCenter y Centro Sinfónico.
Franchesco Díaz Mariscal
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