La naturaleza desde siempre fue un tema de inspiración, pues encierra una serie de elementos como montañas, árboles, valles, ríos, bosques y condiciones atmosféricas, que son partes importantes de cada composición. En este caso están presentes en las hojas secas que la artista Gloria Kawaguchi toma como materia prima para su arte pictórico.
“La hoja de un árbol, que alguna vez mostró su belleza, ahora se convierte en el lienzo perfecto que uso para plasmar mis pinturas, cada detalle, forma y color con la finalidad de darle un nuevo renacer. Y lo más interesante es que en pleno Siglo XXI se busque retener esa naturaleza que se va deteriorando con el paso del tiempo”, dice la artista.
La pintora ha incursionado en esta técnica traída de Australia con el tratamiento especial del secado de una hoja natural de árbol en diferentes tamaños, el más grande tiene 25 centímetros de base en relación con el resto de otras dimensiones, que sirven como lienzos para dar vida a las obras de arte.
“Soy paisajista y le soy fiel al óleo, pinto la naturaleza viva de cielos despejados o nublados, árboles de diversas especies, ríos de agua cristalina, flores de colores vivos como el rojo o amarillo, entre muchos otros, todo cuanto he observado en los amaneceres, atardeceres o cuanta creatividad despierta la naturaleza en mi”, dice la artista.
Su más reciente exposición lleva por título “Paisajes fantásticos” que reúne alrededor de 15 obras en diferentes formatos, pero con la particularidad de utilizar como soporte hojas de árboles del oriente, que son recuperadas para dar vida a paisajes inéditos fruto de su creatividad artística.
Gloria afirma que la creación de un paisaje comienza con un proceso mental en el que tiene mucha importancia la imaginación, las fuentes de memoria del autor, sus referencias más próximas y todos los conocimientos almacenados en la cabeza que le permite expresar en el lienzo toda esa energía que emerge de la naturaleza.
“Cuando hablo de lo fantástico me refiero a esa ruptura en el trama de la vida cotidiana. Sucede cuando un acontecimiento extraordinario atrae la atención del espectador y logra invadir completamente su mundo y lo transforma. Aquí esa normalidad se quiebra. Y su percepción del mundo luego de esta experiencia será distinta”, enfatiza la pintora.
LA ARTISTA
Kawaguchi nació en La Paz y vive en Santa Cruz hace más de 12 años, cursó estudios en la Escuela de Bellas Artes en La Paz, su primer encuentro con el arte lo tuvo en Japón de ahí su influencia en el paisajismo, pero la técnica que utiliza para el secado de hojas la adquirió en Australia.
Ha realizado varias presentaciones por Australia, China, Japón y Nueva Zelanda con sus pinturas al óleo con sus paisajes naturales que muestran una realidad fantástica que es capturada por la destreza de la artista que perpetua en sus obras diferentes momento del día a día.
“A mí me gustan todos los colores en particular los cielos y ríos. Al hacer la mezcla de repente te salen colores que son una maravilla. Usualmente comienzo a pintar por la mañana y termino por la tarde. En ese momento no pienso en nada que no sea mi obra y me olvido del resto del mundo”, asegura la artista.
Entre los proyectos que tiene Gloria están el pintar sobre plumas de aves, esto con la finalidad de renovarse constantemente, probando sobre diversos soportes y dejando volar la imaginación para ver los resultados, reto que se ha propuesto realizar en corto plazo.
“Cuando viajé al Beni vi hermosas plumas de aves y algunas personas se comprometieron a enviarme, pero lamentablemente no lo hicieron. Antes en Santa Cruz se utilizaba plumas para hacer antifaces, en la actualidad ya no lo hacen, porque todo es sintético”, menciona la pintora.
La artista señala que en Santa Cruz se tiene un clima húmedo motivo por el cual el secado de las pinturas demora más y al realizar cada obra se debe tener un cuidado especial al aplicar cada capa de pintura para evitar que se mezclen. Pero pese a ello la inspiración fluye en cada pincela realizada en el cuadro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario