El 19 de noviembre de 2015, Sharon Pérez y Abel Bellido presentaron una propuesta artística para ejecutar un monumento en homenaje al Pueblo Afro Boliviano. La entrega fue realizada por Pérez a pedido de Ignacio Días Estrada, presidente de una Organización Territorial de Base (OTB) en Cochabamba y el arquitecto Gonzalo Alvares de la Alcaldía de la ciudad del Valle. Sin embargo, luego de casi un año, los creadores se enteraron que su boceto fue plagiado por otras personas.
La escultura, que se tenía previsto presentarla hoy en un acto oficial, fue alzada en las avenidas Segunda y Simón López de la capital valluna. "Es una fragante de plagio”, reniega Bellido, uno de los autores del diseño y premiado en varios concursos de escultura.
Su compañera, Pérez cuenta que en noviembre del año pasado Días Estrada y Alvares le pidieron realizar la propuesta artística para que sea aprobada y puesta en ejecución. "La organización Conafro de Cochabamba conoce mi trabajo como artista afroboliviana y me recomienda para elaborar la obra”, explica. Entonces, el representante vecinal se contacta con Pérez. "Me dice que ya estaba por licitarse todo el tema del monumento, que lo que faltaba para que se pueda aprobar era un buen diseño, y que mediante eso nosotros podíamos adjudicarnos el tema de la escultura”, recuerda.
Según Pérez, Días Estrada le aseguró que los artistas serían subcontratados mediante la constructora encargada de las obras de la avenida donde se alzaría la escultura. Después de entregar el proyecto del diseño, la artista intentó comunicarse con el representante vecinal en varias ocasiones para conocer sobre el proceso de contratación.
En marzo, Días Estrada respondió a Pérez. En ese contacto, el vecino aseguró que la licitación ya fue presentada y se subiría al Sicoes para que den la orden para ejecutar el proyecto a una constructora y que ésta contrataría a los artistas para realizar la escultura. "Él indicaba que recién iban a subir al Sicoes, que estaban viendo el tema del presupuesto”, cuenta.
Sin embargo, pasaron los meses y el representante vecinal ya no respondió a las llamadas ni correos electrónicos.
En septiembre de este año, los artistas viajaron a Cochabamba y se encontraron con la desagradable sorpresa que la obra estaba siendo ejecutada con su diseño. "Nunca se nos informó nada al respecto, finalmente al reunirnos con el señor Ignacio Días para ver qué era lo que estaba pasando, como respuesta dijo que en su momento nos pidió que le vendiéramos el diseño pero que dimos una negativa y que el costo de la cotización era elevado, que era un problema traerla desde La Paz por lo que se decidió hacerla en Cochabamba porque tenían que ejecutar el proyecto”, cuenta Pérez.
Incluso Pérez fue hasta la casa de Días para hablar con él. "Me terminó diciendo que iba a cambiar el diseño. Me dijo que era una pena que aún siendo afrodescendiente no pueda ceder el diseño. Sostuvo que iba a significar mucho conflicto el negociar con la Alcaldía para que se suspenda”, relata la artista.
Según los artistas, el dirigente vecinal alegó que el boceto que presentaron no era un plano arquitectónico. "Dijo que podían hacer uso del mismo porque no somos dueños de las figuras geométricas negando así nuestro trabajo intelectual”, explica Pérez. Entonces, en esa reunión, se acordó que cambiarían el diseño para evitar problemas de plagio.
Pérez dice que se negaron a aceptar su diseño porque cuando una artista concibe una idea su mayor deseo es concebirla. "Esa idea tiene que ser realizada por el mismo artista porque uno sabe cómo va a terminar, qué texturas quiere hacer. Ése fue el trato que se hizo con Días, pero él de forma abusiva contrata a otra persona para buscar algo más barato”, comenta.
Finalmente, hace dos semanas, los artistas viajaron otra vez a Cochabamba y descubrieron que la escultura estaba por ser inaugurada. La ceremonia estaba prevista para hoy e incluso se confirmó la visita de autoridades locales y estatales.
Al ver la obra, los creadores se dieron cuenta que no cambiaron el diseño. "Se ve una burla escultórica porque al tratar de copiar la idea del diseño salió como resultado un mal trabajo; dicho trabajo está hecho en resina y fibra de vidrio de muy baja calidad, la superficie es demasiado delgada, más pequeña y no se hizo un trabajo de modelado. Se utilizó el molde de un maniquí y telas sumergidas en resina que para nada dan la forma a lo que en un inicio se presentó en la propuesta”, explica Pérez.
Consultado sobre la denuncia, Días Estrada negó todas las acusaciones. "Los compañeros afrobolivianos me pidieron un favor de colaborar en una de las calles un hito referencial a la saya afroboliviana. Ellos me dieron esos documentos y yo no tenía conocimiento que era de propiedad de la señora. No tengo conocimiento del plagio”, indica.
Sin embargo, los artistas aseguran que Días Estrada no se comunicó con las organizaciones afros en Cochabamba para informar los avances del proyecto. "Guardó absoluto silencio evitando así la supervisión del proyecto, sólo se comunicó para informar la inauguración, y Conafro no se siente identificado con dicha escultura. Además, con esta representación es una ofensa a nuestra cultura queriendo mostrar una escultura en la que no somos representados pensando que no hay un profesional que pueda refutar y eso es algo completamente equivocado”, sostuvo Pérez.
Además de plagiar su diseño, los artistas denunciaron que a su diseño se incorporaron detalles que no representan a los afrobolivianos. "Soy escultor y he visto en la obra falencias increíbles. Pusieron trapos remojados en fibra de vidrio y elaboraron polleras que no van con los afros ni con su vestimenta. No hay trabajo de escultor”, sostuvo.
Tras la difusión de la noticia en las redes sociales, Días asegura que se ha paralizado la inauguración de la escultura. Al ser consultado sobre quiénes elaboraron la escultura, Días respondió: "Justamente habrá un pronunciamiento de los artistas plásticos de Cochabamba porque es un artista muy afanado, se han manifestado. Tengo conocimiento, pero ya no es un tema mediático y legal, no puedo dar nombres de las personas porque pueden ser afectadas”, dijo.
Días dijo además que no existe un recibo que compruebe que los artistas entregaron su diseño. "No hay un recibo recalcó”, indicó. "(Me pregunto) por qué la señora no contribuye al pueblo afroboliviano con una obra. Acá en Cochabamba, los artistas plásticos realizan los proyectos y bocetos, y no cobran. Por eso, Cochabamba es unida y linda”, asegura.
Ninoska Lazarte, secretaría de Cultura de la Alcaldía de Cochabamba, dijo que recibió la denuncia, pero que aún no tiene detalles del caso. La autoridad anunció que lo analizará.
Mientras tanto los artistas continuarán con su denuncia, ya que solamente piden que se respeten sus derechos de propiedad intelectual y autoría.
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