Dibujos y pinturas en técnicas como el pastel, bolígrafo, grafito y tinta, muestran retratos e imágenes de la mujer boliviana realizados por los artistas Eusebio Choque, Freddy Acarapi y Pascual Cori. La muestra, denominada ‘Y Dios me hizo mujer,’ se encuentra abierta en la galería municipal Cecilio Guzmán de Rojas (calle Colón 279).
La exposición acoge a más de veinte obras con una base temática: el retrato de la mujer desde diferentes visiones y técnicas de dibujo.
“El arribo de tres artistas a un escenario cultural que depende del municipio es muy importante debido a la particularidad de sus visiones, percepción, perspectivas, mensajes, colores y técnicas con las que conciben la figura femenina”, indicó Vania Coronado, Jefe de Unidad de Museos Municipales.
LOS ARTISTAS
Eusebio Choque es egresado de la Academia Nacional de Bellas Artes Hernando Siles, Comenzó haciendo dibujo, luego paso al pastel donde expresó su preferencia por mujer andina, sus tejidos y vestimenta. Es uno de los pocos artistas que trabaja con el bolígrafo. Obtuvo varios premios locales y nacionales, entre ellos -el más importante para él- el Gran Premio Salón Pedro Domingo Murillo en la especialidad de dibujo el año 1997. Este logro le abrió muchas puertas, viajó becado a EEUU y sus obras fueron aceptadas en todo el país. Actualmente se dedica íntegramente al arte, vive del arte y piensa impartir charlas a jóvenes sobre dibujo.
Freddy Acarapi Tola, estudió pintura y cerámica también en la Academia de Bellas Artes, donde actualmente es docente de cerámica. Es un artista versátil, aunque más conocido por sy producción en cerámica; aunque nunca dejó el dibujo y la pintura, utiliza la técnica de la tinta, sigue trabajando con exposiciones y según su opinión, el dibujo es su fuerte, tanto así que participó en la Bienal de Taipéi, donde sólo dos bolivianos fueron al evento de dibujo.
Al igual que sus colegas, Pascual Cori Guarachi, egresó de la Academia de Bellas Artes, donde actualmente da clases de dibujo. Su técnica es el grafito, el lápiz negro ‘HB’ clásico que todos hemos utilizado. El artista busca el desnudo de la mujer, pero no sólo un desnudo orgánico o estético, sino el desnudo interno.
Él busca plasmar en su trabajo lo que una mujer posee por dentro, cada una tiene algo único, según el dibujante. “La única forma de ser buenos en lo que hacemos y la de mejorar es el taller, el taller te hace trabajar día a día, no hay que dejarlo nunca, sino ser perseverante”, concluyó el artista.
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