Nacido en La Paz, Carballo comenta que desde niño ha tenido la influencia de sus abuelos, que compartían la misma fascinación por las construcciones en miniatura. "Es una tradición más que todo familiar”, indica el artista.
La obra presentada retrata literalmente a la ciudad de La Paz: la plaza Murillo, el Prado paceño, los puentes Trillizos y otros lugares descansan en las faldas de un imponente Illimani. La incorporación de un mini teleférico, impulsado por electricidad, causa sensación en los visitantes.
Es el gran cariño por la ciudad lo que ha motivado al artista en crear esta hermosa obra. "Se ve muy bonita así la ciudad; en pequeñito”, señala Carballo.
Con 53 años y publicista de profesión, se dedica a crear maquetas para colegios y la Policía. Al no existir una remuneración por su obra, sólo pide a los visitantes depositar algunas monedas en una cajita de cartón que habilitó para tal fin.
"Cada artista sabe comer. Eso es para salvar los días que estoy acá”, pide con amabilidad.
Uno de los problemas por los que tuvo que pasar, según nos comenta, es el buscar espacios donde pueda compartir su arte con el público sin "limitar” el número de visitantes, en ese sentido, fue la Empresa Estatal de Transporte por Cable Mi Teleférico la que lo invitó a exponer su arte en uno de sus espacios.
Para el próximo año, anuncia incorporar la iglesia de Copacabana a su obra. A continuación le presentamos un video y fotografías de la obra.
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