De no presentar los documentos solicitados, la pieza arqueológica conocida como Iqiqu Tunu, que permanece en el museo suizo por casi un siglo, corre el riesgo de quedarse en ese país.
"Los expertos del Museo de Berna están abiertos a devolvernos la illa del Ekeko. Sin embargo, nos explicaron que necesitan un sustento científico sobre la pieza”, aseguró Cárdenas, quien viajó la semana pasada a la capital suiza para reunirse con los responsables de ese repositorio.
La autoridad indicó que la dirección de Berna también contratará a expertos para elaborar un informe que confirme la procedencia boliviana de la pieza arqueológica en disputa.
Bolivia, por su parte, contratará a un equipo de arqueólogos y antropólogos hasta fin de mes. "Entre febrero y marzo, los expertos harán los estudios. Y en abril y mayo se gestionará el retorno de la pieza”, informó Cárdenas. Durante la reunión en Berna, el viceministro expuso a los suizos los motivos por los que la illa debe retornar al país.
"La illa del Ekeko debe volver al país porque es parte del alma de los bolivianos, es fundamental su regreso para nuestras culturas que están vivas. Para nosotros no es una pieza arqueológica, sino una representación ceremonial”, aseveró.
Además, presentó un informe histórico sobre la pieza, elaborado por el antropólogo Cancio Mamani. Sin embargo, el documento no fue suficiente. "(Los expertos) dicen que esos libros no tienen una afirmación científica y que por eso requiere el estudio técnico sobre si realmente la illa pertenece al país”, comentó.
La illa del Ekeko, conocido como Iqiqu Tunu, fue robada de Tiwanaku por el suizo Mojan Jacob von Tschudi en 1858, según el libro Tunupa y Ekako, de Carlos Ponce Sanjinés. Luego fue sacada del país y vendida, en 1929, al Museo Nacional de Berna, uno de los más importantes de Europa. Hace casi tres años, el Gobierno inició las gestiones para el retorno de la pieza. En febrero del año pasado, el ministro de Culturas, Pablo Groux, sostuvo que ya iniciaron los trámites para que el patrimonio vuelva al país.
A la reunión de la semana pasada en Berna asistieron el viceministro de Relaciones Exteriores, Juan Carlos Alurralde; la embajadora de Bolivia en Suiza y Alemania, Elizabeth Salguero; Cárdenas y los guías espirituales Gladis Quenta y Wañay Pacha, quienes realizaron una ceremonia con coca y alcohol para la illa. Mientras que del museo participaron Jackob Messerli, director del repositorio, y Thomas Psota, encargado de la sección de etnología.
El arqueólogo boliviano Jédu Sagárnaga sostuvo que las gestiones del Gobierno son positivas porque están recuperando el patrimonio boliviano. "Desde la Colonia salieron importantes piezas que están fuera del país y que hay que recuperarlas”, sostuvo.
Según Cárdenas, las autoridades bolivianas solicitaron que el retorno de la pieza sea el próximo 21 de junio, para el Año Nuevo Andino Amazónico.
Puntos de vista
Jédu Sagárnaga Arqueólogo
"Recuperar las piezas del país”
Considero que hay que resaltar tres elementos. El primero tiene que ver con la importancia de recuperar el patrimonio arqueológico del país, ya que desde la Colonia miles de piezas fueron sacadas del territorio boliviano.
El segundo elemento es que la pieza fue robada de Tiwanaku. Según varios relatos, se cuenta que el ladrón dio alcohol a los campesinos y de esa manera se llevó la illa del Ekeko.
El tercer elemento es que la pieza pertenece a la cultura Pukara, que es anterior a la de Tiwanaku y que también se desarrolló en el lago. Sin embargo, eso no quita que la illa pertenezca a los bolivianos. Aún se desconoce por qué la pieza se encontraba en Tiwanaku. Creo que los propios tiwanacotas han sacado la pieza como un trofeo y la guardaron cientos de años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario