Los coloridos payasos recibirán la certificación de competencias técnicas en el grado de Artistas en Recreación y Artes Escénicas, que comprende cuatro especialidades: títeres, muñecos animados, magia y fonomímica.
Los títulos se entregarán a través de la unidad de Certificación del Ministerio de Educación en todo el territorio nacional, aunque todavía no hay una fecha definida.
Reynaldo Luna, más conocido como Rapito, es uno de los impulsores de la iniciativa. Relató que antes de entregar la certificación, los técnicos del Ministerio de Educación evaluarán a los payasos sobre sus aptitudes y conocimientos en alguna de las cuatro especialidades.
“El 5 y el 6 de septiembre se desarrolló el primer congreso nacional de artistas, en el que participaron funcionarios del Ministerio, quienes observaron nuestras prácticas y habilidades. Ahora serán plasmadas en teoría y se convertirán en instrumentos de medición para conocer la especialidad de los payasos”.
La iniciativa. Rapito, sonriente, destacó que la certificación es sinónimo de respeto a su sector. “La sociedad nos reconocerá como artistas, los certificados dignificarán nuestro trabajo. Esa situación nos alienta a seguir y ofrecer espectáculos de calidad al público”.
Después de levantar un registro de los animadores, la Asociación de Artistas del Mundo Infantil concluyó que en Bolivia existen entre 800 y 900 payasos en actividad, quienes se beneficiarán con el programa de certificación.
“La Paz, Cochabamba y Santa Cruz tienen más artistas de esta índole, en las otras ciudades, los payasos, cada vez más, ganan espacios mayores”.
La diversidad. Según Rapito, quien se dedica a la animación infantil desde hace 17 años, para ser payaso se requiere tener paciencia y vocación. “Los payasos no nacen, se hacen, porque a medida que pasa el tiempo uno va descubriendo sus habilidades y se practican las gesticulaciones escénicas”.
Destacó que en el rubro no sólo hay artistas infantiles, sino personas especializadas en la animación de bodas, prestes, despedidas de solteros o fiestas para adultos —en las que se hacen bromas de doble sentido—, cumpleaños de 15 años, baby showers, tragafuegos y actos cristianos. Además, el espectáculo más requerido por las personas es la llamada “hora loca”. “Es un paquete completo, no importa qué clase de fiesta sea, nosotros vamos y hacemos un show íntegro con todas las especialidades”.
250 payasos hay en La Paz. Cada quien tiene un rubro especializado, según la Asociación de estos artistas.
Los animadores más antiguos del rubro serán los primeros en recibir la certificación, para que capaciten a los demás payasos de todo el país, según reynaldo luna, representante de la asociación de artistas infantiles de la paz.
Los rubros de estos actores
Actualmente, el Ministerio de Educación prepara la elaboración del estándar técnico, bajo el que se incorporarán las técnicas y habilidades que debe requerir una persona que se desempeña como payaso.
Para que un animador se beneficie con el certificado debe pertenecer a alguna asociación de artistas de este rubro.
Las personas que se dediquen a la recreación con base en títeres se beneficiarán con la certificación.
La especialidad de muñecos animados que asombran a cualquier auditorio también recibirá el certificado.
Los magos, con sus divertidos juegos y trucos, serán beneficiados con el título de artistas certificados.
Los especialistas en fonomímica, que actúan en espectáculos musicales y cumpleaños, recibirán sus títulos.
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