LP: ¿Por qué ingresas al mundo de las artes plásticas?
Jorge: Fue el descubrimiento de algunos dibujos de un tío que falleció hace mucho tiempo, eran muy buenos e intentando replicar lo que él había hecho, es donde me doy cuenta que me gusta el dibujo desde muy pequeño. Mientras estuve en el colegio también desarrollé lo que es el arte solamente por el estudio, ya saliendo bachiller es que ingrese al Instituto de Bellas Artes, creo que es ahí viendo las obras de artistas locales, además de revistas es como analizaba la representación que hacían algunos y era muy bueno, a mí me empujaba a mejorar y si bien uno no es muy bueno al inicio creo que uno mejora con el trabajo.
LP: ¿Cómo te describes como artista y persona?
Jorge: Como artista pienso que estoy en proceso formativo, porque estilos propios todavía no los tengo bien desarrollados, es la verdad, por ello estoy en el proceso de conseguir una identidad propia, estamos en crecimiento, siempre estoy dispuesto a modificar mi trabajo, aprender de mis errores, volver a lo básico, espero que en un año o dos, tener una identidad, un propio estilo. Creo que como persona tengo un carácter cambiante, muchas veces me falta concentración, pero creo que estamos en la etapa de madurar como persona.
LP: ¿Cuál es tu meta como artista?
Jorge: Independientemente uno siempre quiere sobresalir, que la sociedad te reconozca por la calidad de trabajo que uno hace, eso siempre uno va a querer, ser reconocidos como buenos artistas en calidad plástica. Pero la meta que tengo mediata con unos compañeros aquí, con el maestro (Jesús) Céspedes, Luis Mora, Raúl (Quispe), lo que tenemos como meta es consolidar un taller de arte, donde nosotros podamos dar a conocer nuestro trabajo con unos pensamientos bien propios.
LP: Si bien eres joven, ¿Hasta cuándo piensas trabajar en el arte?
Jorge: Siento que haré arte, hasta el final de los días que Dios me dé, porque evidentemente soy arquitecto de profesión, porque uno necesita comer, necesita vestirse, lo que has estudiado, es lo que te da dinero, la verdad es que las personas no estamos acostumbrados a comprar arte, pero cuando eres artista tienes esa necesidad de hacer arte, porque eso te da satisfacción personal. Si Dios lo permite haré arte hasta el final de mis días.
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