Sergio Escalera es uno de los jóvenes creadores de la Sociedad Boliviana de Música de Cámara (SBMC), esta noche estará ofreciendo un concierto benéfico en la Muela del Diablo, a las 20:00, junto a Gabriel Bilbao, Albert García, Claudia Machicado y Karla Jiménez.
El repertorio consigna música barroca, música del romanticismo (Mendelssohn, Saint Saens), música minimalista y “dos estrenos del reconocido compositor cochabambino Luis Moya, quien escribió dos piezas específicamente para la SBMC”, cuenta Escalera.
La finalidad de este concierto es conseguir fondos para Bilbao, García, Machicado y Jiménez, para quiénes la SBMC gestionó “cuatro becas para el festival Música nas Montanhas, en Minas Gerais, Brasil, que se llevará a cabo en enero de 2016”.
La Sociedad Boliviana de Música de Cámara va en su segundo año de actividades y, según asegura Sergio Escalera-- “como una organización joven hemos logrado estrenar en Bolivia varias obras pilares del repertorio de cámara, como el ‘Cuarteto para el Fin de los Tiempos’ de Olivier Messiaen y ‘La Consagración de la Primavera’ de Igor Stravinsky, en versión para dos pianos.
Sin embargo, el logro mayor ha sido el de crear oportunidades para estudiantes bolivianos, para músicos profesionales bolivianos y extranjeros que llegaron a Bolivia, y para públicos muy diversos que tienen un deseo intrínseco de escuchar música de cámara”.
Aunque son muchos los planes que la SBMC tiene para el futuro inmediato, están concentrados en “todo en lo que se refiere a tocar conciertos en más ciudades de Bolivia e integrar más aún a los artistas bolivianos con sus pares de Latinoamérica y el mundo”.
Gran responsabilidad
“La impresión que me dejó el concurso es excelente; la de un certamen internacional comprometido con la promoción de artistas latinoamericanos y la interacción entre ellos”, el pianista Sergio Escalera sobre el concurso que ganó la semana pasada en Perú. “El nivel de los otros pianistas fue muy alto --agrega este talentoso cochabambino--. Escuché a todos los participantes del concurso en alguna de las dos etapas, a algunos incluso en ambas. Disfruté mucho sobre todo de la segunda etapa, y debo admitir que la dedicación y el potencial de estos compañeros incluso me inspiró a elevar mi nivel durante el concurso”.
Para Sergio ganar este premio en Perú le provocó “mucha alegría y satisfacción, ya que es un reconocimiento al esfuerzo y sacrificio que realizo todos los días en mi labor como pianista. Por otro lado, también siento una gran responsabilidad como ganador para compartir lo mío con los otros: con el público que me apoyó, con los otros participantes del concurso, con mis colegas músicos en Bolivia, y con muchos otros potenciales artistas que quizás no han gozado de espacios como éste para desarrollarse y mostrar su talento”.
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