El oficial superior de Cultura, Ubaldo Romero, informó que, este año, la descentralización de la cultura en los diferentes barrios y OTBs dieron importantes resultados.
Entre estos, los más de mil festivales en diferentes ámbitos. En lo que respecta a las artes escénicas, destacó la reactivación de un arte que hacía muchos años había perdido su presencia, como son los títeres y la danza. “Esto nos da pie a pensar en otros proyectos más”, dijo.
Otra de las actividades importantes durante la gestión fue la articulación de la gastronomía y la cultura qhochala, a través de las más de 15 ferias gastronómicas, que permitieron recuperar y revalorizar la preparación tradicional de la comida valluna ligada a las prácticas culturales en torno a ella.
“En 2015 será más agresivo”, acotó.
OBRAS La rehabilitación de los escenarios culturales fue trascendental para dinamizar la actividad de artistas. Este año se concluyó la primera fase del Teatro Achá, y del teatro al aire libre Ulises Hermosa.
La terminación del Teatro Adela Zamudio también fue uno de los logros más destacados.
Ahora se viene el inicio de la segunda fase del Teatro Achá, que demandará una inversión de 7 millones de bolivianos.
Otro de los avances fue la modernización de los servicios culturales, entre éstos la digitalización de la biblioteca y de los archivos históricos, que en poco tiempo más se prepara el lanzamiento de la primera biblioteca digital al mundo.
LOS MUSEOS Bajo la perspectiva de la modernización, los museos también fueron equipados con cámaras, monitores y otros para dar un mejor servicio a los visitantes.
En cuanto a la producción bibliográfica, este año se lograron 50 títulos, entre libros, revistas y textos.
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