Hace 84 años Federico García Lorca regaló al mundo lo que llamaría una farsa para guiñol, pero Ditirambo la convertirá en una farsa popular de títeres y bufones. El poeta español la creó para representar la cultura popular europea, pero los actores cruceños pretenden mostrar la idiosincrasia boliviana; la historia de García Lorca se desarrolla en un retablo, pero la que dirige Luis Jiménez lo hace en un boliche de la periferia. Seis actores cruceños y un director de teatro español se apropiaron de El retablillo de don Cristóbal y mostrarán el resultado, hoy a las 20:00, en la sala de teatro de la Aecid.
De títeres a bufones y de bufones a títeres, los personajes de la obra contarán la vida de don Cristóbal, un anciano que sueña con casarse con una jovencita. Ni la cara ni la billetera lo ayudan a cumplir su propósito y por ello decide hacerse pasar por médico para ganar dinero y comprar a la mujer de sus sueños. Así llega hasta una dama ambiciosa que intercambia a su hija Rosita por dinero. Pero la falta de amor y los años de diferencia no permitirán un final feliz, sino uno digno de verse.
Ariel Vargas, Gerónimo Mamani, Carlos Cova, Pablo Antezana, Carlos Ureña y Porfirio Azogue montan la bufonada
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