Siart 2011, el arte en escena

La realidad contemporánea se teje a partir de múltiples interrelaciones. No es posible entender lo local aislado de la complejidad universal. Una Bienal es un espacio de debate, de confrontación de ideas y de afectos, un lugar para la movilidad del pensamiento y de las prácticas. El arte no es lo mismo que la cultura. El arte es la conciencia crítica de la cultura...

Éstas y otras ideas, planteadas por el chileno Justo Pastor Mellado y el boliviano José Bedoya, están en la base de la convocatoria a la VII Bienal Internacional de Arte Siart 2011, organizada por la Fundación Visión Cultural con la participación y el apoyo de otras instituciones.

Y a esa invitación/provocación respondieron alrededor de 300 artistas de diversas partes del mundo dispuestos a participar con sus proyectos en el concurso. Y en torno a esas ideas se planificaron, además, exposiciones de destacados artistas bolivianos y extranjeros. Y también laboratorios, talleres, seminarios para artistas, críticos, historiadores del arte y promotores culturales. Y también otras actividades destinadas a provocar el diálogo entre las artes plásticas y visuales con otras disciplinas como la literatura y el teatro.

Esa compleja maquinaria finalmente echó a andar el miércoles 12 de octubre y durante un mes se desarrollará en 25 espacios de exhibición y otros centros culturales.

La noche de la inauguración, se dio a conocer los nombres de los ganadores del concurso internacional, una de las actividades centrales del Siart 2011. Esta vez, de los cuatro premios en juego, tres fueron ganados por artistas bolivianos. El premio CAF lo ganó el boliviano Iván Cáceres por su obra Llaukarando al tío para que se venda los bisnes (video instalación que se muestra en la portada de esta edición de Tendencias). Pablo Forero, Guillermo Chandia y Jaime Coronil (Colombia-Chile) ganaron el premio Hivos por su obra fotográfica Módulos perpetuos. El premio La Paz fue para el boliviano Galo Coca por su performance Aquí. Finalmente, Santiago Contreras, también boliviano, ganó el premio arte joven España con su acción artística Babeles.

Estas obras, junto a otras 30 seleccionadas para el concurso, se exponen en diversos espacios de la ciudad. A esta muy diversa oferta para el público se suman las exposiciones de los 12 invitados de honor. Entre ellos figuran de Bolivia Claudia Joskowitz (dos video-arte de esta notable artista cruceña se muestra en el Espacio Simón I. Patiño), Ligia D’Andrea (Museo Nacional de Etnografía y Folklore) y Ricardo Pérez Alcalá (Casa de la Cultura Franz Tamayo y Salón Cecilio Guzmán de Rojas).

El Siart  2011 no sólo pondrá en escena durante un mes esas muestras artísticas, también se ha constituido en un espacio de debate sobre ese polémico objeto llamado “arte contemporáneo” en torno al cual giran artistas, críticos, curadores, historiadores y otros intelectuales. Ese arte que parecería necesitar para existir cada vez más de sesudas teorías y complejas justificaciones. Y cuya relación con el público es cada vez más esquiva. El Siart será también el espacio propicio para discutir el lugar, las posibilidades y las contradicciones del arte y los artistas contemporáneos en la Bolivia de hoy. Y, de hecho, ya ha planteado la relación entre las instituciones culturales y la producción artística. En fin, la Bienal ha comenzado, la mesa está servida