La obra pertenece al escritor italiano Alessandro Baricco y fue escrita en 1994. A partir de entonces recorrió distintos escenarios del mundo y hoy se encuentra en Bolivia, como una propuesta sin igual en trabajos de este género.
HISTORIA DE UN NIÑO
El monólogo empieza con la historia de un niño, quien es abandonado en un barco, donde descubre su talento y se convierte en el pianista más famoso del mundo, al que todos quieren ver y escuchar interpretar sus melodías.
En cada episodio, el actor transmite una importante dosis de sensibilidad y realismo, que hacen que el público se sienta partícipe de la historia, que trascurre al interior de un barco.
Con la vida del músico se desenvuelve la realidad de la migración de Europa hacia América, en el que se reviven los momentos más sensibles y dramáticos de las personas y las familias migrantes de 1900. Una historia que le da al público argumentos valiosos para valorar aquellos episodios de la historia de ambos continentes.
EN EL ATLÁNTICO
La trama transcurre en el océano Atlántico, donde las historias se entrecruzan con la del músico, que un día decidió nunca bajar del barco, donde creció y desarrolló su talento, que le permitió una importante dedicación a la música a la que considera lo más importante de su vida.
En las escenas puede apreciarse importante concepción de la música. En esta parte del argumento, el jazz es reconocido por su aporte a la música y por representar, por excelencia, el drama de la migración.
La obra está llena de experiencias para el público asistente. Es una invitación para que las personas interactúen y se sientan parte de cada una de las escenas que propone la trama. El sonido, las luces y los efectos visuales son parte de la historia que sorprende y cautiva al público asistente.
CONVERTIDO EN BARCO
“El escenario y el resto del teatro se convierten en un barco, razón por la que el público se siente parte de la trama y también de las emociones que se viven en esta historia”, dijo el actor Daniel Aguirre.
También en la obra se experimenta la realidad de la migración y todos sus efectos, además de otras incertidumbres que sufrieron las familias europeas que irremediablemente tuvieron que dejar su país de origen.
El actor Daniel Aguirre Camacho nació en Bolivia, donde desde muy joven incursionó en el teatro; en sus inicios como parte de la compañía “Teatro del Ogro”, donde bajo la dirección de un director italiano logró afianzarse en la especialidad. Participó en varias obras que llegaron a ser reconocidas, no sólo en el país sino a nivel internacional.
TRAYECTORIA ARTÍSTICA
Sus primeras armas las realizó en el teatro popular, donde aprendió varios aspectos importantes de las artes escénicas. “Fue una experiencia inolvidable que me enseñó la dinámica de la actuación”, sostuvo.
Radicó por varios años en Ecuador y visitó varios países de Latinoamérica y Europa, como Chile, México, EEUU, Italia, España, entre otros. Entre las obras en las que participó se encuentran “Frágil”, “Sol Amarillo”, “120 kilos de Jazz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario