Unas 11 academias participan de la tercera versión de la Semana de la Danza que, además, le rinden un homenaje a la notable maestra de danza Ana Canedo Trigo. La reposición de obras clásicas en versiones árabe, española, folclórica, moderna y contemporánea captó la atención del público que colmó los espacios del Teatro de la Cultura Tarija en cada función.
El responsable del Teatro, Freddy Chamas, no pudo ocultar su satisfacción por el éxito logrado con cada puesta en escena a cargo de los cuerpos de baile de las más destacadas academias de danza y ballet de la ciudad.
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“Estoy encantado, para que participen previamente se realiza una evaluación bastante exigente y, a pesar de que conozco a los grupos de baile, he quedado gratamente impresionado por sus desempeños. El público que ha asistido puede darse cuenta de que no tenemos nada que envidiar a los grupos del exterior”, apuntó.
Algunas puestas en escena se realizaron por primera vez en Tarija, como la obra Giselle de Adolphe Adam, interpretada de manera folclórica chapaca o la ópera Carmen del compositor Georges Bizet en versión masculina y en caño.
Fue el ballet Poder y Sentimiento, bajo la dirección de Carlos Gutiérrez el que puso en tablas la obra de Bizet, pero bajo el nombre de “Carman”. Este personaje tiene un temperamento fiero que seduce a un militar; sin embargo, también tiene amoríos con un torero. Engaños que conducen a un final trágico: el uniformado termina matando a Carman.
“El trabajo de interpretar y llevar esta obra clásica al pole dance fue espectacular, el tubo, los aplausos, la aceptación del público fue conmovedora, estoy muy agradecido”, expresó Gutiérrez luego de concluida la presentación.
Otra obra particular mostrada por el ballet Un Paso al Arte fue Pájaro de Fuego, dirigida por Cecilia Raña y Claudia Saravia, que contó con más de 45 bailarinas en escena y cuenta la historia de un ave encantada que es descubierta por unas cazadoras, además encuentran a unas princesas esclavizadas por el mago de la maldad y que tiene sus secuaces. Al final es el Pájaro de Fuego el que libera a las princesas y con su magia acaba con la maldad.
Raña y Saravia contaron que la obra de Manuel de Falla fue adaptada para ser una fusión de jazz y ballet clásico, lo que la hizo más actual y moderna, Participaron sus cuerpos de baile de mayores y juveniles y les tomó dos meses ensayarla.
Un tema interesante por su propuesta fue “El walicho de la bruja”, puesto en escena por el ballet Vapura, dirigido por Jorge Mercado. La historia cuenta el conjuro que hace una hechicera, lo que se llama un atado de amor y al que mucha gente recurre para conseguir que la persona amada corresponda.
“Me basé en ese tema común y le puse como personajes a la bruja, un gaucho salteño, unos cuatro espíritus. La música está basada en chacareras conocidas, interpretadas algunas por el grupo “El cuervo pajón” y una zamba romántica”, explicó Mercado.
Otra obra presentada fue la Muerte del torero, de la academia de ballet “Octavio Campero Echazú”, dirigida por Ana Canedo. En esta ocasión fueron la danza y la música española las que inundaron los ambientes del Teatro de la Cultura con al menos 56 bailarinas y cuatro varones,
“Hemos hecho una especie de recreación de la muerte de un torero, con las dolientes vestidas de negro, cubiertas de tules negros y que representan la pena, pero la vida avanza y viene la alegría de los gitanos, la jotas de las chiquititas, que encaminan otra vez la vida en una senda alegre y que nos llena de satisfacción”, explicó Canedo.
Hoy es el acto central de homenaje a la maestra
Ayer se presentaron las obras Copelia, a cargo de la academia Afrika Bambaata dirigida por Alejandra Romero, luego fue el turno del ballet Belly Art con 7 Reinas, dirigida por Yordana y Yolanda Suárez y finalmente se presentó El Lago de los Cisnes a cargo del ballet Proyección, bajo la dirección de Salomón Guerrero. Hoy por la noche, a partir de las 20.00 será el concierto de los profesores y el acto central de homenaje a Ana Canedo Trigo.
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