Comunicadora, directora y actriz inquieta, Erika Andia, con mucho esfuerzo fue abriendo su propio camino y haciéndose de un nombre en el medio artístico. Sus más de 20 años actuando en el teatro, el cine y la televisión avalan su notable trayectoria. “Creo que soy polifacética, hice todo estilo de teatro. Soy admiradora de las obras de Raúl Salmón, desde niña hice teatro popular. También hice la línea del teatro pobre que hace el Teatro de Los Andes, un teatro más antropológico, pero también hice teatro contemporáneo, entonces mis obras son muy diversas y eso me alegra mucho porque no me encasillo en una línea”, asegura la experimentada actriz boliviana.
LG: ¿DESDE CUÁNDO Y CÓMO NACIÓ TU VOCACIÓN POR LA ACTUACIÓN?
E: Todo empezó en colegio, luego en la universidad, en último año, fui parte del taller de teatro de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) y también del taller de teatro de la Universidad Católica Boliviana. Luego el Teatro de los Andes abrió un taller y asistí junto a mi grupo y fue ahí, en este taller, que defino mi vocación y con otros amigos dejamos todo para dedicarnos de pleno al teatro.
LG: SIEMPRE EXISTE ESE ALGUIEN QUE NOS INSPIRA, QUE NOS EMPUJA A RECORRER UN TRECHO, ¿A QUIÉN O A QUIÉNES ADMIRAS EN TU PROFESIÓN?
E: Hay bastantes personas a las cuales admiro mucho. En mis inicios he tenido el gusto de trabajar con don Tito Landa, quien me animaba a seguir con este arte, una linda persona. También a César Brie, el (otrora) director del Teatro de los Andes, a quien considero uno de mis principales maestros. David Mondacca es otro de los actores y directores a quien admiro, fue parte importante de mi formación, como también lo fueron María Teresa Dalpero y varias personas más.
LG: ¿TIENES REGISTRADO EN CUÁNTOS TRABAJOS PARTICIPASTE, YA SEAN OBRAS TEATRO, PELÍCULAS Y SERIES DE TELEVISIÓN?
E: Huyyy… de obras de teatro la verdad no conté, pero quizá en más 40 obras, son muchísimas que ya no recuerdo (sonríe), hice ocho películas y tres series, una El Zeta, dos, El sartenazo y otra educativa que hicimos con la Universidad Católica Boliviana.
LG: ¿HAY ALGUNA OBRA TEATRAL QUE MÁS TE GUSTÓ?
E: “Las abarcas del tiempo”, que la hice con el Teatro de Los Andes, fue un sueño cumplido trabajar con ellos. La otra es “Alias don Quijote”, que fue una de las últimas producciones de mi grupo, el Teatro Duende.
LG: ¿ERES UNA ACTRIZ A TIEMPO COMPLETO?
E: Desde el año 95 que trabajo a tiempo completo (sonríe). Actualmente estoy repartiendo mi tiempo con la docencia y los ensayos, tengo la fortuna de vivir de lo que me gusta… el arte.
LG: ¿QUÉ TE AUTOCRITICARÍAS?
E: A veces creo que abarco mucho, me presentan proyectos y digo: “Sí, sí, sí…”. y a veces quien mucho abarca poco aprieta. Pero la verdad es que estoy muy contenta, tengo varios proyectos e intento cumplir de la manera más profesional en cuanto a tiempos.
LG: ¿QUÉ SIGNIFICA EL TEATRO EN TU VIDA?
E: Es lo que me realiza, lo que me hace sentir feliz, el teatro es un instrumento muy poderoso para hacer reflexionar a la gente y es en esa línea que estoy yendo ahora, porque considero que las obras te tienen que conmover. Hoy están pasando tantas cosas que los artistas no podemos ser indiferentes y a través del teatro hay que dar nuestra palabra.
LG: ¿QUÉ SIENTE ERIKA EN UN ESCENARIO?
E: Muchos nervios, a pesar del tiempo, los nervios son como los de la primera vez, pero también es una realización. Los actores tenemos la posibilidad de vivir muchas más vidas (sonríe).
LG: TALENTO O ESFUERZO, ¿QUÉ CONSIDERAS QUE TIENE MÁS IMPORTANCIA?
E: Esfuerzo, porque uno tiene que trabajar y yo soy un ejemplo de eso y soy testigo de otros compañeros. Una entrenando y trabajando puede pasar barreras y lo mismo pasa con mis alumnos, el teatro te ayuda, el teatro es mágico.
LG: ¿QUÉ ES LO MÁS COMPLEJO Y LO MÁS PLACENTERO DE TU CARRERA?
E: Tiene más cosas buenas porque te realizas, puedes vivir más vidas, tienes un desarrollo personal muy interesante a través del teatro y lo que veo de malo es que no hay políticas culturales en nuestro país a nivel artístico. A veces la estructura de la sociedad y también cómo piensa la gente te juega en contra y muchos de los artistas abandonan el camino porque no puedes vivir de eso o no hay apoyo de la familia. Yo la verdad es que me considero muy afortunada porque puedo vivir de mi arte, pero falta políticas culturales, estamos viviendo una crisis en el país que ya se nota y a lo primero que sacan recursos es a la cultura. Se ha suspendido el Festival de El Alto, el de Oruro. En el Ministerio de Culturas ahora no les pagan a los artistas, antes les pagaban, se está trabajando una Ley Municipal de Culturas, pero también no se escucha a los artistas. La Ley Nacional de Culturas ha quedado en cero, los artistas no tienen seguro…
LG: ¿CUÁL HA SIDO EL PAPEL QUE MÁS HAS DISFRUTADO Y POR QUÉ?
E: Huy, muchos, pero la Domitila de ¿Quién mató a la llamita blanca? me ha traído muchas satisfacciones, estamos pensando y soñando que pueda haber una segunda parte de esa película (sonríe). Otro papel que me encantaba era hacer de Sancho Panza y uno reciente es Lisistrata, es que al final disfrutas de todos.
LG: ¿QUÉ ES LO MEJOR QUE TE HA DADO LA ACTUACIÓN EN ESTOS AÑOS?
E: Mis amigos, mis compañeros de vida, por ejemplo Percy Jiménez y Pablo Brossman, que fueron mis primeros compañeros, son como mis hermanos. A veces trabajamos juntos, otras nos separamos, pero cuando nos encontramos hay esa complicidad.
LG: HABIENDO HECHO TEATRO, CINE Y TV, ¿DÓNDE TE SIENTES MÁS A GUSTO?
E: Con toditos, el teatro lo estoy disfrutando mucho a nivel docencia, me gusta enseñar. El cine es mágico, verte en la pantalla grande, ¿no? y en la tele es enorme la fuerza de la televisión, puedes hacer muchas cosas a través de la pantalla chica. A mí me da mucha pena que vemos pura imitación de otros países y pienso que se debería hacer más producción nacional, como series, telenovelas, programas educativos. En este momento creo que nuestra televisión no está bien.
“HAY QUE DEJAR QUE LAS COSAS FLUYAN”
Erika Noemí Andia Balcázar nació el 6 de marzo en La Paz. Es licenciada en comunicación social de la Universidad Católica Boliviana, donde también estudió teatro en el Taller de David Mondacca. Es soltera, tiene una hija que se llama Clara Valentina Muñoz Andia.
LG: ¿CÓMO ES TU CARÁCTER?
E: Creo que soy bastante tranquila, pero también tengo mi carácter (sonríe).
LG: ¿CUÁL ES TU FILOSOFÍA DE VIDA?
E: Hay que dejar que las cosas fluyan, todo es por algo y cuando uno lucha contra esas corrientes de la vida, sufres.
LG: ¿TU VIRTUD?
E: Soy trabajadora, a todo lo que hago le pongo todo el empeño para que salga bien.
LG: ¿TU DEFECTO?
E: Abarco mucho a veces y también soy “atrasona”.
LG: ¿TUS HOBBIES?
E: Ver películas.
LG: ¿A QUÉ LE TEMES?
E: Creo que a la soledad y por otro lado aún tengo la suerte de estar con mis padres y el pensar que algún rato se van a ir, me da miedo….
LA CASA MÁGICA
La Casa Mágica es una escuela de teatro, proyecto de esta multifacética actriz paceña, dedicado a niños, niñas y jóvenes que quieran incursionar en la actuación. Sus puertas fueron abiertas en mayo de este año. “Estoy muy feliz siendo docente, con la escuela estamos formando el primer elenco de teatro de niños y también de jóvenes. La primera obra que estamos trabajando es El flautista de Hamelin, adaptado a nuestra Bolivia”, contó Erika, visiblemente emocionada por este logro.
LAS KORY WARMIS
Las Kory Warmis (Mujeres de oro) es otro de los importantes trabajos en los que está sumergida Erika Andia. Se trata de una compañía teatral, compuesta por mujeres comerciantes de la ciudad de El Alto, que surge a raíz del Proyecto “Mujer en Camino”. “El objetivo es empoderar a las mujeres a través del teatro. Son 22 mujeres que soñaron con actuar, estar en un escenario, pero que por el trabajo y por distintas circunstancias de la vida no lo pudieron lograr, pero, hoy por hoy, gracias a su esfuerzo, se están profesionalizando y eso nos alegra”, destacó.
Otro ambicioso sueño de la actriz es que el teatro llegue a un sector que está un poco olvidado, como es el de los adultos mayores. “Quiero armar y es una necesidad, un elenco de teatro de personas de la tercera edad porque considero que son personas que tienen muchas historias y cosas que contar. No olvidemos que todos vamos a llegar a ser viejitos”, reflexiona.