Durante dos años, Carlos Biggemann se propuso fotografiar cielos de diferentes lugares, "enamorado de los colores, formas, texturas, contrastes y drama que sólo los cielos pueden presentar”.
El resultado es una colección de cientos de imágenes, de las que Biggemann escogió las mejores para presentarlas en su retorno a Bolivia. Su fin es mostrar "cómo los cielos pueden hablar por sí solos”.
El fotógrafo presentará la exposición Cielos dramáticos, que será inaugurada el 9 de enero, a las 11:00, en la galería Blanco (Av. Montenegro, E10, San Miguel).
Biggemann estudió en el Aoraki Politécnic en Dunedin (Nueva Zelanda) y obtuvo su Certificado de Fotografía Digital en 2012.
Tiene Síndrome de Down y siempre fue una persona perseverante. También vivió en Sydney (Australia), donde comenzó a participar en las competencias de natación de Olimpiadas Especiales. La pasión por este deporte continúa hasta hoy.
Su fotografía titulada Spread Your Wings Little One fue escogida entre las 25 imágenes preseleccionadas de un total de 300 concursantes. Luego, la foto fue elegida entre las finalistas del concurso My Perspective 2014, en Londres (Inglaterra).
En 2015, su imagen titulada A Journey Never Ends fue elegida entre casi 250 imágenes postulantes para ser una de las 25 imágenes preseleccionadas en My Perspective Premios 2015, también en Inglaterra.
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