En esta oportunidad no pudo faltar la danza clásica como apertura del espectáculo, para luego continuar con una selección de danzas españolas, siguiendo con danzas de otras regiones del mundo y culminar con un extracto del folklore de México.
Bajo la dirección de Luis Fernando Gómez Chavarría, las diferentes categorías impresionaron con las ganas que pusieron en escenario, aunque se notó en algunos pasajes de la presentación, el nerviosismo y la falta de ensayo, algo que no mermó en todo el show brindado por niños, niñas, jóvenes y señoritas que dejaron todo en las tablas.
Durante el repertorio español, la presentación de Fernando Gómez dejó a un público sorprendido, porque se demostró que aún existe la calidad artística de un verdadero coreógrafo, reconocido a nivel internacional.
La sencilla escenografía fue el marco preciso para la presentación de cada una de las danzas, con un vestuario impecable, como es característico de esta compañía, que representó a Bolivia en varios encuentros fuera del país.
En esta oportunidad la presentación de la compañía fue dedicada a la memoria de una de sus primeras bailarinas, que tuvo el ballet, Pamela Romero Rodríguez, quien a causa de una enfermedad falleció la gestión pasada, pero se recordó el amor que sentía a la danza, tanto en escenario, como en el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, por ello se contó con el bloque Cholitas de la Fraternidad Morenada Central de Oruro, donde bailó por última vez.
No faltó la ovación de pie al concluir con la presentación, por el compromiso de los danzarines, coreógrafo y familias que están involucradas detrás de cada presentación, seguros de retornar en un año para brindar un espectáculo mejor a los anteriores.
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