“Memorias del Silencio” es el nombre de la puesta en escena con la que el mimo francés Philippe Bizot continúa festejando sus cuatro décadas de carrera. Luego de un año, el actor vuelve a Bolivia, lugar que ama, para actuaciones en el Teatro de Cámara del 4 al 9 y del 11 al 13 de agosto.
En una entrevista con EL DIARIO, Bizot explica que en esta oportunidad la puesta en escenario será un paseo revisando sus obras en más de cuarenta años de carrera, además que será entrevistado por Clarivel Loayza “explicaré en vivo cómo nacen mis imágenes”.
Su estadía en el país, sobre todo en La Paz, servirá también para dar dos talleres: “uno será dirigido a mis amigas las Cebras y el otro abierto para todo el público, este taller se realizará en el Caza Duende. El contenido tiene que ver con el aprendizaje del silencio, de sus códigos, de sus perspectivas, pero también el taller pretende hacer de cada uno de mis actores un actor único con su propio estilo, su propia escritura. Su propia estética”, explicó.
Bizot tenía ocho años cuando la pantomima entró a su vida. Fue en una presentación de Marcel Marceau. Nunca más se ha despegado de este arte. "Todo mi cuerpo es una pantomima. Todo es silencio en mi vida".
En ese señor de cara pintada, el pequeño encontró las ganas. Le impactó ver a Bip allá solo en el escenario, dando un mensaje sin necesidad de hablar. “Su gestualidad era excelente y yo sentía el peso, el color, el perfume de las cosas que él representaba”.
El mimo francés se pinta así mismo. Con su cara blanca, la gente se reconoce cuando está frente a él, en el escenario. Él diría que es casi como un espejo en el que se pueden ver. Y entonces sienten eso que él está diciendo.
Nadie le enseñó su arte: “Soy completamente autodidacta”. Le aburren las palabras y el silencio es un arma fundamental en su vida. “La fuerza del silencio es tan grande que supera al teatro hablado; el silencio es un lenguaje universal, actúo por todo el mundo y cada quien me entiende, es el lenguaje de las emociones, de la sinceridad”.
Hablar de su inspiración es sencillo, explica: “Me siento por las calles y observo a la gente, cada persona que entra en mi campo visual es un principio de historia, yo robo imágenes, actitudes, miradas, escribo mucho y de mis escrituras nacen guiones y después pinto y por fin actuó, mi principal inspiración es son la memoria, el sueño, el amor, las esperanzas”.
En cuanto a los proyectos que tiene en mente en el país, está una gira junto a su elenco de actores chinos en esta oportunidad plantea realizar una öpera del país asiático con actores bolvianos. “He empezado a hablar de esto en estos días y claro, al final esta opera con actores bolivianos seria actuada también en China”.
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