viernes, 20 de marzo de 2015

Jaime Calizaya retorna con pinturas de toros al acrílico



Vestido de negro, conversador y culto, atraído por las formas que provocan los movimientos del toro, Jaime Calizaya trajo por cuarta vez una muestra de su obra pictórica, esta vez en acrílico y en torbellino de colores calientes y fríos en el que cada cuadro atrae por su luminosidad y el juego de matices.

Hecho natural
Para Calizaya ingresar en la pintura fue un hecho natural, en su familia se vivía un ambiente que lo condujo automáticamente al arte, nunca se le cruzó por la mente dedicarse a otra actividad y si bien en colegio era bueno para matemáticas, física y química, ni siquiera consideró la idea de estudiar alguna carrera de ciencias exactas.
Con la intención de seguir esta carrera, del pueblo donde se crió, Machacamarca, se fue a Oruro, pero por desconocer la ciudad y la existencia de un centro de formación plástica, se inscribió en una carrera que se aproximaba a sus intenciones, Arquitectura, en la Universidad Técnica de esa ciudad. Un año después, casualmente se entero de la existencia de la Escuela Superior de Bellas Artes e inmediatamente se inscribió.
“Creo que he tenido una buena formación, un excelente maestro Valerio Calles, para mi era el mejor dibujante de Sudamérica, era un bohemio, ex minero con 10 hijos y que tuvo una vida muy tormentosa, no pudo salir de ese medio y estoy agradecido con él porque sus obras me han inspirado mucho”, recuerda sobre esos días de formación.
Si bien se considera capaz de hacer una escultura, cerámica o grabado, privilegia practicar, además del dibujo, todas las técnicas de la pintura, pastel, acuarela, óleo, acrílico, cáustica y piroxilina, que es una pintura para automóviles que “Siquieros utilizó en sus murales exteriores porque aguanta la intemperie, no se decolora, tampoco craquela, pero su único defecto es que tiene un secado casi instantáneo”, detalla.
Sobre el tema de la exposición, explicó que el toro es un animal simple y a través de esta trama diversifica los colores, las formas, los contrastes y en el que lo más importante es que el tratamiento pictórico debe estar bien resuelto.

El singular recorrido artístico del pintor

Nacido en Potosí, Jaime Calizaya estudió en la Escuela Superior de Bellas Artes y la Universidad Técnica de Oruro. Realizó exposiciones individualmente todos los años desde el 1994 hasta 2012. Tiene más de 100 exposiciones colectivas en Brasil, Argentina, Perú, Chile, Puerto Rico, Suecia, Egipto, Alemania, Estados Unidos y Bolivia.
Recibió las siguientes distinciones, entre las más importantes de los últimos años: Primer Premio, Pintura, Salón Nacional “14 de Septiembre”, Cochabamba - Bolivia. 2004. Distinción al mérito, Pintor del Año, Asociación Boliviana de Artistas Plásticos; Programa Cultural “Pueblo y Arte” y Oficialía Mayor de Cultura H.A.M.O. Oruro – Bolivia, 2007
Primer Premio, Pintura, Salón Nacional de Pintura, Honorable Alcaldía Municipal de Oruro, Oruro - Bolivia. 2007. Primer Premio, Pintura, Salón Nacional de Artes Plásticas “Pedro Domingo Murillo”, Honorable Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, La Paz – Bolivia. 2011
Su obra se halla publicada por ejemplo en: “Pintura del siglo XX en Bolivia”, Pedro Querejazú, La Paz, Bolivia. 1991. “Colección de obras de arte del Banco Central de Bolivia”, Comisión del LXXVII, Aniversario del BCB, La Paz, Bolivia. 2005.

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