Como parte de una estrategia a mediano y largo plazo para reconfigurar las políticas culturales del municipio de Cercado, la Oficialía Superior de Culturas propone un debate en el que se agrupe a todos los actores que directa o indirectamente participen del quehacer artístico cultural.
Así por lo menos lo expresó el titular de esta Oficialía, dependiente de la Alcaldía Municipal, Max Munckel, quien está dispuesto a generar un debate participativo para tocar puntos neurálgicos de las políticas culturales que actualmente rigen la gestión municipal.
El primer paso ha sido la presentación de una agenda cultural del municipio, editada y distribuida por la Oficialía pero que no sólo incluye a las actividades oficiales sino que agrupa a todo tipo de evento, sea cual fuese la institución organizadora.
De esta forma nació ayer Resquicios, una agenda de actividades artístico-culturales cuya proyección es publicarla cada mes.
Para ello se cuenta con el presupuesto garantizado y la colaboración de las instituciones independientes que se dedican a la cultura (como la Alianza Francesa, el Centro Patiño o el Martadero).
“Se trata de que todos nos sintamos incluidos en la gestión de la Oficialía para que no se quede —como en años anteriores— en hacer sólo relaciones públicas de las otras dependencias municipales”, señala Munckel.
Para el Oficial Superior de Culturas, hay varias aristas que deben contemplarse si se quiere lograr una gestión integral y participativa.
Una de ellas, definitivamente es lograr generar un debate, entre todos los artistas, gestores, instituciones y autoridades, para definir hacia dónde se proyectan las directrices culturales.
“Estamos empezando con esta agenda cultural, de todo el municipio, luego queremos organizar un debate-taller con la gente de teatro para darle una nueva visión al Festival de Teatro Peter Travesí”, sostiene Munckel.
Pero la gestión incluye también el acceso a la tecnología que hasta ahora ha sido casi inexistente en la distribución de presupuestos en las gestiones anteriores de la Oficialía.
Como ejemplo, podemos mencionar, la incorporación de un sistema de búsqueda digitalizada y la base de datos en la Biblioteca Municipal, gracias a la colaboración del Centro de Documentación e Información Bolivia (Cedib).
Desde esta semana, esta nueva herramienta tecnológica en la Biblioteca permitirá no sólo brindar mayores recursos a los lectores sino darle mayor capacidad de coordinación hacia las Comunas, donde las bibliotecas están casi en el olvido.
Munckel apunta a que desde hace varios años no se ha hecho absolutamente ninguna adquisición bibliográfica importante para la Biblioteca y mucho menos la actualización de títulos.
Además, el presupuesto en la Oficialía de Culturas es tan bajo, dice Munckel, que casi el 30 por ciento se va en el sueldo de la Banda Municipal que está a su cargo y que en realidad cumple la función de acompañar al Alcalde a sus diferentes visitas a barrios, inauguraciones u otros eventos.
“Se trata de eso”, dice Munckel, “de que entre todos debatamos para saber cuál es la mejor manera de proyectar nuestros recursos y de esa manera justificar nuestra gestión de manera participativa y no unilateral”.
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