El violinista es parte de una familia de talentos nacionales que le dio grandes satisfacciones al país. Hizo su carrera profesional en el extranjero: se formó en Argentina, llegó a primer violín y concertino de la Orquesta Sinfónica de la radio de Basilea, Suiza, donde radicó 35 años. Tras su jubilación, en 2001, regresó a Argentina para fijar su morada.
Desde allí vuelve periódicamente a su tierra, esta vez acompañado por su esposa, con el fin de compartir su música. Ambos interpretarán un repertorio “selecto, variado y ecléctico, en muchos casos miniaturas, joyitas”, provisto de obras universales de diversas épocas, incluso algo de tango, género que marca los orígenes musicales de Susana Lorenzo.
La pareja, satisfecha de estar en Bolivia, afirma que tiene pendiente, para su próxima estadía, conocer los pueblos de las Misiones de Chiquitos y su música.
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